Todos los que algunas vez fuimos desocupados (quizás ahora te pase), sabemos lo que es no tener trabajo. Hoy estoy convencido de que lo más importante después de Dios y la Familia, es el Trabajar. Y siempre digo que el corazón del pueblo argentino y fundamentalmente de la historia de Berisso, es sin lugar a dudas la lucha por el trabajo.
Por eso, en este día tan especial y simbólico, no podemos dejar de resaltar que ha sido este proyecto político popular con pensamiento nacional quien más ha hecho por la generación de fuentes de trabajo, que ha venido a darle el real valor a las discusiones salariales, restableciendo las paritarias como elemento fundamental de los derechos de los trabajadores. En estos últimos diez años el Estado estuvo dirigido por tres gobiernos sucesivos que hicieron del trabajo, junto con la producción y el consumo, los pilares del crecimiento, desarrollo y progreso del Pueblo Argentino. Y todavía falta mucho más.
Es nuestra responsabilidad como dirigentes políticos, asumir el compromiso de pensar, de cara al futuro, en el trabajo como eje primordial para el crecimiento regional. Con un Puerto que le sirva a Berisso, con una ciudad que este de cara al Río y generando las condiciones para que se instalen empresas y generen puestos laborales. Con un Estado municipal presente y ordenador.
Los peronistas debemos poner por encima los puntos de unión que tenemos, como la defensa del proyecto nacional de cara al futuro. En definitiva, nuestro desafío es seguir transformando, desde el peronismo como columna vertebral del Frente para la Victoria, garantizando el trabajo, la independencia económica y la soberanía política, para poder llevar a cabo la justicia social.
Escribo estas líneas con la certeza de que Berisso es el trabajo, y que por lo tanto, siempre voy a estar del lado de los trabajadores.