El Tribunal Oral Federal 2 de San Martín condenó a 4 años y 3 meses de prisión al motorman Daniel López por el choque de trenes ocurrido en 2013 en Castelar, donde murieron tres pasajeros y más de 300 resultaron heridos. Además, el tribunal dispuso inhabilitarlo por 10 años para ejercer su profesión.
La sentencia a cargo de los jueces Daniel Cisneros, Daniel Petrone y Diego Leif Guardia, se conoció hoy pasadas las 13.30, tras las réplicas de los alegatos y las últimas palabras del acusado.
La Fiscalía había pedido para López una pena de 4 años y 9 meses de prisión y que lo inhabiliten por 10 años en sus funciones, mientras la querella encabezada por el abogado Gregorio Dalbón había solicitado una condena de 11 años.
López conducía el tren de la UGOMS que el 13 de junio de 2013 chocó contra otro en la estación Castelar y provocó la muerte de tres pasajeros y heridas a más de 300. El fiscal Alberto Gentile destacó al pedir la condena que López había tenido "culpa conciente" en el siniestro.
En la causa, el maquinista fue acusado por los delitos de "estrago culposo agravado", porque hubo muertes a raíz del impacto que generó, de acuerdo a la fiscalía, por un manejo "temerario", aunque no tuvo intención de provocar la tragedia.
La querella, en tanto, había pedido una condena a 11 años de prisión por "estrago doloso" contra el motorman al sostener que tuvo la intención de provocar el choque. Incluso, el abogado querellante, Dalbón, sostuvo que debió tener "alguien detrás de él" y pidió que se investigue al secretario general del gremio de los maquinistas La Fraternidad, Omar Maturano, y al sindicato Unión Ferroviaria.
Gregorio Dalbón, el abogado de la querella, dijo a la señal TN: "Hemos conseguido algo importante que es que este personaje que mató vaya preso. Ahora investigaremos a La Fraternidad. Este es un antecedente para Once, para que quede claro que los motorman son los autores materiales del hecho. Luego puede haber partícipes necesarios, pero que quede claro que los motorman no son santos".
Y agregó que "muchas veces vienen a mentir. Este vino a decir que no le andaban los frenos. Pero comprobamos, y en el video se ve, que tenía hasta último momento la posibilidad de frenar el tren, y no lo hizo. Este es un aliciente para las familias y un aviso para los motorman, no se van a poder escapar".
El abogado también recordó que miembros de La Fraternidad se presentaron ante la Justicia durante el juicio y brindaron falso testimonio. "Hay tres gremialistas que vinieron a mentir. Queremos saber si detrás de los que mintieron hay algún tipo de cobertura. El tribunal me dio la posibilidad de estudiar a los gremialistas, y al titular de La Fraternidad, Omar Maturano. Me permitieron investigarlo y esto es lo más trascendente del fallo", expresó.
El 17 de diciembre, cuando comenzó el juicio, el maquinista López se negó a responder preguntas. Según la fiscalía, ni bien López partió de la estación Morón se topó con señales luminosas que indicaban que debía tener precaución y luego detenerse, y pese a ello continuó su marcha hasta impactar con el otro tren.
En ese contexto, la acusación sostuvo que además avanzó con "permanente tracción y con ascenso de velocidad", en tanto la pericia técnica constató que los frenos funcionaban correctamente.
Este fallo por el choque de trenes de Castelar se produjo mientras en los tribunales federales de Comodoro Py, el TOF 2 integrado por los jueces Jorge Tassara, Jorge Gorini, y Rodrigo Giménez Uriburu, continúan con las audiencias del juicio oral por el accidente de Once. En las audiencias de está semana declaró el perito oficial, ingeniero Raúl Díaz, quien ratificó que el sistema de frenos del tren siniestrado funcionaba correctamente y que no fue aplicado por el motorman Marcos Córdoba al momento de detener la marcha de la formación en el andén de la estación Once.
Según testificó el perito oficial Díaz ninguno de los dispositivos de frenado que posee el tren fue aplicado por el motorman Marcos Córdoba, ni por el guarda que lo acompañaba en el recorrido. Además, Díaz sostuvo que “de los análisis sobre los contactos del Controlador Principal, surge que el motorman anuló el sistema de seguridad denominado Hombre Muerto”.
Del informe y las declaraciones de los peritos a cargo de la pericia técnica-mecánica surgirán los elementos centrales para determinar por qué el tren chapa 16 no detuvo su marcha y colisionó provocando una tragedia.
Por el accidente de Once, se encuentra imputado el motorman Marcos Córdoba por el delito de descarrilamiento culposo (art. 196), con pena de 1 a 5 años de prisión, junto a otras 28 personas, entre ellas los ex secretarios de Transporte de la Nación Ricardo Jaime y Juan Pablo Schiavi, el ex interventor de la CNRT Eduardo Sícaro, el ex Subsecretario de Transporte Ferroviario Antonio Luna y los directivos del grupo empresario que tenía la concesión del ferrocarril Sarmiento.