A pesar de ratificar en el cargo a funcionarios del sistema penitenciario que se desempeñaron durante la administración Scioli, el Gobierno bonaerense comandado por María Eugenia Vidal se apresta a la aplicación de una serie de medidas tendientes a modificar el perfil de ésta área marcadamente cuestionada en su proceder por los organismos de Derechos Humanos durante la pasada gestión.
En este sentido, y en el marco de una ceremonia de egreso de 531 oficiales penitenciarios, el ministro de Justicia bonaerense, Carlos Mahiques, adelantó que “vamos a trabajar en el mejoramiento edilicio y en las condiciones de trabajo, en un incremento salarial y acompañado con sanciones de nuevas leyes”.
Recalcando que se apostará “al crecimiento del Servicio Penitenciario, y no sólo para con las personas privadas de libertad, sino también para con el personal”, Mahiques recalcó ante los egresados: “Queremos crear las mejores condiciones posibles para el desempeño de su tarea, ya que llevan adelante una misión sumamente importante, muy digna. No es una mera custodia de los internos, sino la de acompañar su desenvolvimiento en pos de una reinserción social efectiva. Los penitenciarios son los garantes de la seguridad en las prisiones y de la humanización en el cumplimiento de las penas”.
De esta manera, voces de la cartera de Justicia provincial indicaron a Letra P que uno de los principales lineamientos de gestión será apostar a un cambio de perfil en materia penitenciaria, aunque no precisaron detalles acerca del paquete de leyes que tienen previsto impulsar al respecto.