En Lanús hubo otro borocotazo de la mano de Gabriel Ruiz, el dirigente de los panaderos que integró la lista a concejales por Cambiemos -en el segundo lugar de la boleta- pero que diez días antes de las elecciones apoyó al candidato del Frente para la Victoria (FpV), Julián Álvarez. Como nunca renunció a su candidatura ingresó al concejo deliberante por Cambiemos y ahora habla bien del intendente electo Néstor Grindetti y retornó a su espacio.
En la tarde noche del 15 de octubre pasado, Ruiz oficializaba su acompañamiento a la candidatura del camporista Álvarez en un acto en la sede del Sindicato de Obreros Panaderos. El anunció sorprendió ya que el sindicalista figuraba en la lista que diez días después a ese encuentro competiría con el propio kirchnerista. Por las dudas Ruiz no había renunciado a la boleta amarilla.
Las elecciones pasaron y las urnas le dieron un revés al FpV coronando a Grindetti como el próximo intendente. Rápido de reflejos, cuando Grindetti empezó a tomar funciones ejecutivas, Ruiz “tocó el timbre”.
“Grindetti me dio la oportunidad y cumplió con la palabra. Por lo tanto, como me enseñaron, si tuve un error pongo la cara como lo voy a hacer desde el 10 de diciembre por cada vecino que me necesite”, dijo Ruiz para justificar su regreso.
Además –según replica el sitio Diario Conurbano- Ruiz reconoció el accionar y las acusaciones contra el ahora intendente (había expresado que estaba usando al peronismo). “Por ahí no fue lo apropiado porque uno a veces dice las cosas en la política como si fuera el gremialismo. Me di cuenta que tengo una responsabilidad”, se excusó.
El 10 de diciembre asumirá su banca dentro del bloque “Juntos por Lanús”.