El oficialismo neuquino triunfó, luego de que Sapag, impedido por la Constitución para aspirar a un nuevo mandato, se uniera a su actual ministro de Hacienda, para competir en la provincia.
Con el 56 por ciento de los votos, Gutiérrez obtuvo su segunda victoria electoral consecutiva tras la elección en la que se consagró como presidente del partido, fuerza que gobierna la provincia de Neuquén desde 1963.
El ganador anticipó que seguirá trabajando en la línea de Sapag, aliado al gobierno nacional, y sostuvo que el triunfo es de toda la provincia.
Por su parte, Sobisch, que consiguió el restante 44 por ciento de los sufragios, reconoció la derrota durante una conferencia de prensa en la que afirmó que “el que gana conduce y el que pierde acompaña”.
Según el MPN, se registró una participación cercana a los 115 mil electores, en comicios que se realizaron “a padrón abierto” y que contaron con la participación de una gran cantidad de “independientes”.