La endeble campaña de Sergio Urribarri tiene fisuras hasta en su propio territorio. Es que la gira del ministro de Trabajo bonaerense, Oscar Cuartango, por las ciudades más importantes de la provincia, expuso los problemas para controlar al movimiento obrero.
Lo que provocó la furia del presidenciable sale a la luz luego de que inaugurara en San Telmo el bunker del “Movimiento Sindical Urribarri Presidente”. El encuentro, que terminó de gestarse en Concordia, y comenzó en Paraná a finales de octubre, marcó los cortocircuitos en el justicialismo.
Acompañado de varios referentes locales, Cuartango inició la jornada en el noreste con una visita a la Cooperativa Empaque de Frutas y continuó con un encuentro con el Movimiento Obrero Entrerriano. Luego, fue recibido por más de 100 sindicalistas y referentes políticos en la CGT local entre los que se destacó la presencia del ex jefe comunal, Juan Carlos Cresto. Esa cumbre, fue lo que más enojó a Urribarri.
Según pudo saber Letra P, la posibilidad de una reunión en la sede del Partido Justicialista (PJ) no le gustó para nada y el Pato llamó a varios de los organizadores para frenarlos. “(Esto) confirma la gran ascendencia que tiene Daniel Scioli no solo en la provincia de Buenos Aires –la cual recorremos constantemente en nuestro rol institucional- sino en todo el interior del país, y especialmente en las provincias del litoral argentino”, afirmaba el Ministro en Concordia, mientras por los teléfonos no paraban de sonar.
“Creo que es necesaria la unidad del movimiento obrero y ese es uno de nuestros objetivos”, insistía el funcionario de la Ola Naranja, en un territorio clave, donde comenzó buena parte del Sueño Entrerriano. Por su historia vinculada al peronismo, por tener al mandatario titular de la Liga de Intendentes Justicialistas (Gustavo Bordet) y por ser un distrito clave en la elección para el 2015 que, como siempre, tendrá injerencia directa para definir el próximo Gobernador, es un espacio trascendental.
“La mayoría de los gremios tienen delegaciones en toda la provincia, por eso, con mucho respeto, estamos trabajando para que la candidatura de Daniel Scioli siga más firme”, le explicaron a este portal los armadores desde la agrupación “Trascender” Peronista. Otra de las cuestiones, es que en la CGT provincial, varios sindicatos se dividieron –no de forma oficial– y restan fuerzas a las filas urribarristas. El mejor ejemplo lo da el el titular de la CGT Regional Paraná, Adrián Narduzzi (farmacéuticos), quien estuvo presente en la cumbre.
Lo que sucedió muestra ciertas cuestiones que preocupan a Urribarri. A pesar de que busca instalar bipolaridad con Scioli, dejando afuera de esa disputa a Florencio Randazzo, no logra subir en los números. Como informó este portal, La Cámpora le bloqueó todos los caminos para ser el “puro” que compita en las PASO.
El trabajo de José Ottavis en la Legislatura bonaerense, o de Eduardo “Wado” de Pedro, son la clave del pacto de no agresión para que la transición al 2015, con un triunfo del Frente para la Victoria (FpV).
“Somos respetuosos, por eso existe unidad sindical, pero Daniel es nuestro candidato”. La frase se repite una y otra vez, mientras Urribarri busca trascender en el electorado más allá de su dominio político.