“Todo se puede solucionar si hay buena fe”, dijo Pérez y evaluó que los docentes “tienen un poder de negociación mucho mayor al de otros gremios” y por eso reclaman con insistencia que se reabra la paritaria.
Asimismo, sostuvo que los paros que realizaron “son medidas de fuerza acordes para un Gobierno que no paga los sueldos o los aguinaldos, pero no para un Gobierno que responsablemente hizo las reformas para poder cumplir”, enfatizó.
Por su parte, el titular del Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (Suteba), Roberto Baradel, cuestionó al Gobierno bonaerense por la falta de respuestas al reclamo docente, quienes piden un aumento del 30 por ciento en las negociaciones paritarias para el sector.
“Es llamativo que la provincia de Buenos Aires pueda cerrar acuerdos paritarias con otros sectores, por el 24 ó 25 por ciento en dos tramos, sin ningún tipo de inconvenientes, y están por arriba de la paritarias de los docentes. Está teniendo una política salarial discriminatoria con los docentes”, se quejó el gremialista.
La semana pasada los médicos y los judiciales de la AJB aceptaron la oferta de la administración provincial.
“No es una cuestión de dinero, sino una decisión política de no moverse” del 22, 6 por ciento, comentó el titular de Suteba en declaraciones a Radio 10 destacó que le sorprende este conflicto que tuvo “mucha intensidad en el mes de marzo”, pero el “Gobierno no hizo absolutamente nada para resolverlo”.
Baradel afirmó que el gobernador Daniel Scioli “no entiende que tiene que mejorar un poco ese porcentaje, y cobrarlo este año”.
Esta semana continuarán las medidas de fuerza en reclamo de aumentos salariales si el Gobierno no realiza una “oferta superadora”, después de la llamada al diálogo que hizo la Provincia en las últimas horas tras la suspensión de la denuncia judicial que se iba a iniciar contra los dirigentes gremialistas.
En lo que va del ciclo lectivo, los docentes bonaerenses concluyeron doce días sin actividades, medida que fue cuestionada por los funcionarios, que exigieron a los maestros que recuperen las clases perdidas, además de descontarles los días no trabajados.