Política

Punto por punto, por qué de Narváez no cierra con el PRO de Macri

Cuando parecía encaminado un acuerdo con el macrismo –que incluía, entre otros, al intendente de San Isidro, Gustavo Posse–, esa opción entró en el freezer. En las filas coloradas dicen que  “Mauricio está midiendo muy mal en el conurbano”. Ahora esperan mediciones tomadas después de las trágicas inundaciones en Capital y La Plata antes de tomar decisiones.

Con la cabeza puesta en las legislativas de este año, Francisco De Narváez ya decidió participar dentro del PJ disidente sin alianzas con el PRO. Su gran incógnita es contar con unos 20 mil fiscales en las urnas, por lo que apura acuerdos con Hugo Moyano y Gerónimo “Momo” Venegas.

 

Se especulaba que De Narváez y los diversos espacios peronistas no K y el macrismo se agruparían de cara a los comicios.

 

Sin embargo, el referido armado muestra por ahora un altísimo nivel de dispersión, con estrategias particulares y contrapuestas y un creciente y duro nivel de confrontación entre ellos. Uno de esos enfrentamientos lo protagonizan Francisco De Narváez y Mauricio Macri. Cada uno dice a quien quiera oírlo que no cerrará un acuerdo electoral con el otro.

 

“Tenemos proyectos distintos –les dijo De Narváez a sus operadores- yo quiero ser gobernador y él no va a ser presidente”.

 

Casi todas las encuestas que llegan al búnker de Las Cañitas muestran que Mauricio Macri está midiendo muy mal en la provincia de Buenos Aires, lo que mantiene stand by cualquier acercamiento hacia las filas del jefe de Gobierno porteño.

 

“Que ellos vayan a las PASO con sus listas, después del papelón van a tener que bajar sus listas”, se escucha en Las Cañitas.

 

Fuentes del comando de De Narváez aseguran que las encuestas que manejan muestran al empresario en un escenario de virtual empate con Alicia Kirchner, una de las cartas que puede jugar el Frente para la Victoria. Pero la preocupación aparece si se agrega en los sondeos al intendente de Tigre, Sergio Massa. En los sondeos en que sí se agrega como opción al ex jefe de Gabinete, la intención de voto del “colorado” cae violentamente.

 

Fiscalizar para garantizar la elección

 

Más allá del armado o no con otra fuerza lo que desvela por estas horas a De Nárváez es contar con una estructura que le garantice fiscalizar las elecciones. En los últimos comicios, hubo habilitadas en Provincia de Buenos Aires 31.519 mesas electorales, distribuidas en 4.162 escuelas o establecimientos de votación.

 

Los operadores duchos en procesos electorales recomiendan “dos cada tres mesas mínimo”. “Lo ideal  es uno por mesa, pero es verdaderamente un ejército, una estructura que sólo te pueden garantizar partidos como el PJ o la UCR”, consignan.

 

En ese orden, el “colorado” espera que la Justicia electoral habilite los partidos de Hugo Moyano y Gerónimo “Momo” Venegas, para poder establecer algún tipo de acuerdo y contar con la estructura de ambos dirigentes para el aporte de los codiciados fiscales.

 

Si bien el diputado reconoce que la tropa camionera puede ser una herramienta fundamental para fiscalizar la elección, al mismo tiempo conoce los inconvenientes de que Moyano, en persona, pretenda figurar como candidato.

 

Las claves del NO a Macri

 

  • Con la cabeza puesta en las legislativas de este año, Francisco De Narváez ya decidió participar dentro del PJ disidente sin alianzas con el PRO.
  • En las filas coloradas dicen que  “Mauricio está midiendo muy mal en el conurbano”.
  • Ahora esperan mediciones tomadas después de las trágicas inundaciones en Capital y La Plata antes de tomar decisiones.
  • “Tenemos proyectos distintos –les dijo De Narváez a sus operadores- yo quiero ser gobernador y él no va a ser presidente”.
  • Fuentes del comando de De Narváez aseguran que las encuestas que manejan muestran al empresario en un escenario de virtual empate con Alicia Kirchner, una de las cartas que puede jugar el Frente para la Victoria.
groggy
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