Uber, la plataforma mundial de autos particulares con chofer, anunció su desembarco en San Carlos de Bariloche. La empresa comunicó que los choferes que hicieran los primeros 50 viajes recibirían un pago extra de 100.000 pesos y que la app estaba habilitada para incluir taxistas. En menos de una semana, inscribió a más de 100 personas con vehículos listos para trabajar y despertó al monstruo, que encendió un conflicto gremial en la ciudad que elegirá a sus nuevas autoridades en septiembre y en la que se palpita la interna entre la gobernadora saliente Arabela Carreras, que aspira a pelear por la intendencia, y el mandatario electo Alberto Weretilneck.
La protesta sindical rebotó en los despachos del Centro Cívico y en las empresas y sindicatos, ante una enorme demanda dormida de una ciudadanía cansada de un sistema de transporte ineficiente y costoso. Radios y portales se atiborraron de llamados celebrando y apurando la novedad. La ruidosa reacción de corporaciones de taxistas en las que se confunden propietarios de autos y licencias con trabajadores “asustados porque van a quedarse sin trabajo” rodeó la plaza del Centro Cívico, justo cuando el intendente Gustavo Gennuso, alineado con el oficialismo provincial, estaba de viaje promocionando la ciudad.
La solitaria expresión del diputado Agustín Domingo, uno de los posibles candidatos a intendente por Juntos Somos Río Negro (JSRN), que hace mucho vaticinaba como inevitable la llegada de las plataformas al destino turístico por excelencia del país, contrastó con las voces oficiales dubitativas, que se vieron obligadas a expresarse, contener el ruido del sector y no enfrentarse a miles de vecinos y vecinas que claman por la necesidad del servicio.
Latente está la figura de Carreras, quien busca gobernar su ciudad natal cuando deje el Ejecutivo provincial, pero que atraviesa con Weretilneck uno de los peores momentos de su tensa relación. La escalada de conflictos con los sindicatos estatales que jaqueó a la provincia en medio del proceso electoral afectó la campaña del senador y despertó en su entorno críticas a la mandataria. El vínculo está dañado, como lo demuestra que, a 10 días del triunfo electoral del 16 de abril, ambas figuras no se mostraron juntas en una foto que ponga el punto de partida para la transición.
Mientras tanto, en Bariloche, el CEO de Cabify, Guillermo Minieri, le confirmó a Letra P que antes de fin de año también estarán circulando sus autos en la ciudad lacustre, incluyendo choferes de taxis y remises. “Queremos ser la opción de transporte número uno, tanto de los barilochenses como de los turistas, muchos de ellos ya clientes nuestros en otras ciudades”, apostó.
Señales
Gennuso está en París para apoyar la postulación de Bariloche a la Expo Mundial 2027 y el estallido de la protesta gremial confrontó a Marcela González Abdala, la jefa de Gabinete en persona, cuando ingresaba a la Municipalidad y se topó con choferes en llamas. Lo que tenía que decir no era grato para los profesionales del volante: nada impide la instalación de Uber.
“Hay ciudades que lo prohibieron. Acá no hay habilitación prevista, pero tampoco hay una prohibición. Lo que no está prohibido, está permitido”, explicó la funcionaria a Letra P.
No obstante, para sosegar la protesta, prometió equilibrar las condiciones para evitar la competencia desleal, un control riguroso de todos los aspectos (antigüedad del auto, carnet profesional, revisión técnica, etc.) para que Uber deba cumplir los mismos requisitos que el resto de los servicios.
Domingo, a favor
El diputado Domingo, un dirigente identificado con Weretilneck, quien lo impulsa a pelear la intendencia para suceder a Gennuso, que no puede competir por un tercer mandato, debió soportar toda clase de calificativos en la marcha, desde algunos perfiles de redes sociales y en declaraciones periodísticas. Incluso en una de las ocasiones en la que expresó argumentos a favor de las aplicaciones (seguridad, menores costos, aumento del empleo para particulares y también taxistas, mejor servicio para residentes y turistas, regularidad fiscal), le respondieron con un tuit viralizado que informaba que había sufrido un ACV.
Más amigo de conversar y acordar que de confrontar, Domingo desmintió la versión con otro tuit y se tomó el tema con humor. “Corrí una maratón, la mejor manera de desmentirlo”, afirmó, en referencia a la carrera Noche de Reyes. No obstante, recordó que también se quedó solo en su prédica al comienzo, considerando que “la gente está abrumadoramente a favor, pero la política sigue actuando a sus espaldas, a favor de un grupo minúsculo que pierde privilegios”.
El empresariado turístico suma su aporte a la disputa y alienta con fervor la llegada de las plataformas. “Es muy bienvenido, no nos podemos cerrar a la innovación y es una necesidad que hoy tiene la ciudad ante la imposibilidad de cubrir la demanda de transporte”, dijo a Letra P Ezequiel Barberis, presidente de la Cámara de Turismo de Bariloche.
Consideró que la movilización en contra “fue desmedida, sin sentido”, ya que “hay trabajo para todos. Bariloche es un destino internacional donde el pasajero ya reclama ese servicio y esa es una demanda insatisfecha”.
Interna gremial
Luis Mora se presenta en Bariloche como el único representante reconocido oficialmente del sindicato de peones de taxis. Dijo que cada seis meses deben enfrentarse a inspecciones municipales, verificación técnica, renovación del carnet profesional y deben contar con un seguro exigido para la tarea. “Por eso estamos en desventaja con Uber, que pone a cualquier chofer y cualquier auto a trabajar”, agregó.
Luis Barrales es secretario general del sindicato de Peones de Taxis.
Reconoció deficiencias en el sistema culpando al municipio y opinó que las plataformas operan con “trabajadores en negro" y los sistemas se prestan a “mucha inseguridad porque no se sabe quién es el que está arriba del auto. ¿Responden cuando hay un problema con un seguro en un accidente? No se conoce a nadie a quién reclamarle".
“Barrales está desesperado porque los taxistas se le están yendo con Uber, se le termina el negocio”, expresó uno de los cientos de llamados recibidos por las radios en defensa de las plataformas. La pelea no es nueva y se replica en cada ciudad donde aterrizan las aplicaciones. En Bariloche, le suma un condimento adicional a los meses previos de una contienda electoral que promete alto voltaje.