El Impuesto PAIS, vigente desde 2019, llegó a su fin este lunes y se redujo significativamente el costo de operaciones en dólares como compras en el exterior, servicios digitales y pagos con tarjeta. Esto implica un descenso en el valor del dólar tarjeta, que pasa a cotizar a $1.357,85, en vez de $1.671,20.
Sin embargo, el recargo del 30% por Ganancias o Bienes Personales sigue aplicándose, manteniendo esta cotización por encima del dólar MEP y del dólar blue.
¿Qué sucede con la percepción de Ganancias o Bienes Personales?
Aunque la eliminación del Impuesto PAIS alivia las cargas sobre el dólar turista, el anticipo del 30% a cuenta de Ganancias o Bienes Personales persiste. Este porcentaje puede ser recuperado al cierre del año fiscal si el consumidor no está alcanzado por dichos impuestos, lo que hace de este dólar una opción aún costosa frente a alternativas como el MEP, que cerró este viernes en $1.142,20.
El impacto en las plataformas digitales
La eliminación del Impuesto PAIS también reduce los costos de plataformas como Netflix o Spotify, que tenían una carga adicional del 8%. Sin embargo, aún se aplican otros tributos como el IVA (21%) y el 30% de Ganancias, lo que modera el beneficio. Por ejemplo, el plan básico de Netflix bajará de $6.921 a $6.491, mientras que el plan premium pasará de $15.615 a $14.645.
El efecto en las cuentas públicas
La eliminación del Impuesto PAIS implica una reducción en la presión fiscal sobre consumos en dólares, con un impacto directo en compras en el exterior, servicios digitales e importaciones. Sin embargo, esta medida también conlleva una disminución en la recaudación fiscal, lo que afectará las cuentas públicas. Este cambio se enmarca en un plan del Gobierno para ajustar la estructura tributaria, buscando equilibrar los costos para los consumidores con la sostenibilidad del sistema financiero.