Debate Buenos Aires

Mónica López: “El acuerdo Massa-Vidal deteriora la tarea legislativa”

Entrevistada por Letra P, la diputada cuestiona a su ex jefe político, dice que “la ley de paridad no es exclusiva de Malena (Galmarini)” y confirma su cercanía con el Grupo Esmeralda.

Fue parte del denarvaísmo, el massismo y el sciolismo y, tras la derrota electoral de 2015, decidió mantenerse en su unibloque “Peronismo bonaerense”, desde donde tiende lazos con los intendentes PJ del Grupo Esmeralda.

 

La diputada provincial Mónica López no reniega de su historia y se autodefine “siempre peronista”.

 

Entrevistada por Letra P, la legisladora aborda la actual situación política en el Parlamento bonaerense y la relación de la gobernadora María Eugenia Vidal con los diferentes bloques partidarios.

 

-¿Cómo influye el acuerdo legislativo entre Sergio Massa y la gobernadora Vidal? 

 

-Creo que deteriora la tarea legislativa porque la semana pasada, por ejemplo, Cambiemos y el massismo, como no pudieron sostener ese acuerdo, provocaron que se cayera la sesión. Entonces no se votó el blanqueo de capitales ni la paridad de género. Aunque, igual, no estamos hablando de un tema de la vida cotidiana de la gente.

 

-La paridad de género es un tema propuesto y publicitado por el massismo, particularmente por Malena Galmarini.

 

-No es un tema exclusivo de Malena, es un tema de todas las mujeres. No hay que equivocarse cuando le dan la banderita a alguien. Las legisladoras de todos los bloques trabajamos en este tema y todas somos parte del reclamo de paridad.

 

-Pero por ahí busca protagonismo con ese tema para instalarse.

 

-Bueno, que sea diputada entonces. Porque acá hay un montón de proyectos de paridad desde hace muchos años.

 

-En el último tiempo se ha mostrado en actividades junto a los intendentes del PJ del Grupo Esmeralda. ¿Planea mudarse de bloque?

 

-No, voy a seguir en mi bloque, Peronismo bonaerense. Yo asumí una identidad y un territorio. El peronismo, que me identifica a mí desde antes de nacer y la provincia de Buenos Aires. En base a eso, yo me muevo y me manejo. Obviamente que agradezco la invitación que me han hecho para participar de muchas actividades.

 

 

-Pero, ¿cuál es su vínculo con ellos?

 

-Mi vínculo es desde el peronismo. Después, las cuestiones políticas se van a ver cuando llegue el momento. Hoy hay una responsabilidad que es de los intendentes que gobiernan y nosotros que legislamos. Hay intendentes que gobiernan distritos que son enormes y es responsabilidad nuestra cuando levantemos la mano para un presupuesto o endeudamiento, o el fondo de seguridad. Depende de los legisladores si ese intendente va a seguir teniendo ese fondo para ayuda y compensar la inseguridad que a veces tiene en su distrito.

 

-¿Y los jefes comunales peronistas del Grupo Fénix?

 

- Acá hay un grupo que fundamentalmente es peronista y hay otro grupo donde está un sector de La Cámpora. Ya ahí hay una diferencia. Por lo menos yo nunca me identifiqué con La Cámpora. Donde está el peronismo acompaño y voy a colaborar en este proceso de los intendentes. Pero del resto, que se maneja con prioridades del cristinismo, no formo parte.

 

-Como ex candidata e integrante de la Celeste y Blanco creada por Francisco De Narváez, ¿qué cree que sucedió con esa construcción política?

 

-Después de un triunfo tan importante como tuvimos en 2009, las cosas se fueron manejando mal. En 2011, se armó un frente electoral que nos llevó al fracaso y muchos de nosotros decidimos tomarnos un tiempo para ver hacia dónde queríamos ir. Yo nunca fui kirchnerista, pero siempre fui peronista, y lo que busqué fue un lugar donde poder hacer política y ayudar a resolver los problemas. Y creo que hubo un mal manejo y no hubo autocrítica. De hecho, ese espacio quedó totalmente disuelto. Algunos fueron al Frente Renovador, otros volvieron al peronismo ya sin Cristina (Kirchner) y otros fueron con el PRO. Fueron buscando sus lugares. El peronismo va buscando lugar de poder, no soy hipócrita con eso.

 

-Usted fue con Sergio Massa…

 

-Muchos hicimos el recorrido de buscar un lugar donde poder recalar y poder ser oposición constructiva. Muchísimos de los legisladores del Frente Renovador han estado con De Narváez, no soy la única, porque pareciera que soy el estandarte de eso. Algunos con perfiles más o menos importantes también han hecho largos caminitos y largos trayectos. Hay algo que no me pueden endilgar: nunca fui K y, además, anticipé las cosas que iban a pasar el año pasado. Lamentablemente, no me equivoqué. Y hoy, el massismo es un aliado político de Cambiemos y ha cometido y comete errores. A mí me han castigado por anticipar todo esto que ahora está pasando.

 

-¿Qué posición adoptaría si se concretase un acuerdo de los intendentes peronistas con Sergio Massa?

 

-La semana pasada, estuvimos en la reunión en Lomas de Zamora con los intendentes y no se habló de ese tema. Pero lo peor que nos puede pasar es ir a buscar líderes de barro, que se disuelven en la primera lluvia y la lluvia es cuando no tenes votos. Massa se diluyó el año pasado con un 14 por ciento. Terminó siendo un líder de barro y hoy no mide más de lo que sacó el año pasado. El problema fue que siempre fuimos a buscar líderes de barro para ganar una elección. Carlos Ruckauf, Daniel Scioli. Porque medían bien y, al final del día, nos fue muy mal. Porque el cartel es muy lindo pero después hay que darle contenido. Y si pensamos que tenemos que ir a buscar un candidato porque mide, la verdad que después nos quedamos vacíos y terminamos rebelándonos y yendo disparados a otros lugares donde encontremos contenido político, donde podamos defender la política no desde una encuesta sino desde soluciones a la gente.

 

- Por primera vez la provincia de Buenos Aires tiene una gobernadora mujer. ¿Le gusta esta nueva situación?

 

-Sí. Yo quise gobernar la Provincia y soy mujer y, por lo tanto, esas dos cosas acompaño. Y la acompaño en su lucha contra el narcotráfico, contra la corrupción, porque es mujer y sé lo que se siente tener responsabilidad política.

 

-¿Ha hablado con ella?

 

-No, no me junté nunca con Vidal, pero así y todo he votado muchas cosas que tienen que ver con la emergencia en seguridad, en infraestructura. Porque uno tiene que tener responsabilidad. Y yo doy mi voto de confianza. Más allá de los egos políticos que cada uno tiene, vivo en la Provincia y quiero que las cosas vayan bien.

 

-Usted no coincide con el acuerdo legislativo que cerró con Massa. ¿Le hubiera recomendado no hacerlo?

 

-No, yo puedo conversar con un par, un legislador, pero no le voy a decir a la gobernadora lo que tiene que hacer. Sí puedo hacerlo con un par, pero con la gobernadora no. Sería una falta de respeto. Ella está segura de cómo gobierna.

 

-Usted es de Avellaneda...

 

-Sí, ahí tengo la Fundación, un local político, familia. Bueno, vivo en Avellaneda.

 

-Y tiene, además, un intendente kirchnerista.

 

-Sí (ríe), pero me llevó bien con (Jorge) Ferraresi. No tengo problemas en lo personal. Tengo concejales que han acompañado muchas de las cosas que ha hecho bien.

 

-El próximo año se termina su mandato como diputada. ¿Buscará renovar la banca?

 

-No lo sé, no lo pienso. Las cosas no están fáciles para la política. Cuesta cada vez más hacer política. Es mucho esfuerzo, para el que lo toma en serio. Cuesta mucha la visibilidad, ser público, una personalidad pública, y a veces el latigazo es duro.

 

 

 

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