La histórica sede de la UCR de Córdoba, ubicada en pleno centro de la Capital, es la sede de las negociaciones por los 10 aspirantes al Concejo Deliberante que Rodrigo de Loredo, el candidato a intendente de Juntos por el Cambio, reservó para la fuerza que representa.
Confluencia, núcleo interno que lidera Ramón Mestre, pelea por dos escaños pese a que el negociador por Evolución, Marcos Ferrer, le asignó uno.
Cabe aclarar que no es el exintendente quien se bate a duelo con el deloredista que, como si fuera poco, competirá en la PASO de Río Tercero este domingo en la fase previa a la búsqueda de su reelección. Ramón Mestre transita la rosca capitalina con suficiente distancia: acompañó al presidente de la UCR, Gerardo Morales, en su gira por Buenos Aires; y este sábado reservó su tiempo para un plan familiar en las sierras cordobesas.
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Diego Mestre resiste. Pelea por dos lugares para el mestrismo que, hasta ahora, no consigue. La presión de dos concejales que exigen una chance para lograr su reelección va en aumento. Se trata del jefe de bloque radical Alfredo Sapp y Cecilia Aro, quienes quieren que se les reconozca políticamente su trabajo legislativo desde 2019.
Pese a todo, la legisladora que quedó fuera de la lista provincial, Verónica Garade Paneta, continúa picando en punta. Las chances de Aro se reducen, aunque la exsecretaria de Educación, luego de Gobierno municipal, seguirá dando pelea.
Otro de los propuestos por el mestrismo (de Ramón) era su exjefe de bloque en el recinto cuando gobernó la ciudad. Lucas Cavallo era uno de los ternados, aunque Sapp también espera la continuidad si el escaso margen de una segunda banca para Confluencia existe. Todo parece indicar que el deloredismo sólo dará un espacio para contenerlos.