Con un fuerte operativo en Morrillo y Orán, el organismo nacional desarticuló una red de contrabando y detuvo dos personas vinculadas al tráfico de materiales.
La Aduana realizó allanamientos en el norte de Argentina e incautó bienes valuados en $380 millones
La Dirección General de Aduanas (DGA), bajo la órbita de la nueva Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), realizó esta semana un operativo en conjunto con Gendarmería Nacional Argentina (GNA) en el norte del país, focalizado en los municipios de Morrillo y Orán.
La acción incluyó el allanamiento de varias propiedades y el decomiso de bienes valuados en más de 380 millones de pesos.
El despliegue buscaba desarticular una red de contrabando dedicada al tráfico de metales ferrosos y no ferrosos (hierro, acero, bronce, cobre) y elementos de infraestructura eléctrica como cables de alta tensión y transformadores. Además, se detectaron rieles de ferrocarril, presuntamente extraídos de vías ferroviarias con herramientas suministradas por ciertos gobiernos locales.
El operativo alcanzó propiedades en la frontera con Bolivia, a lo largo del río Bermejo, un área donde las redes de contrabando han aumentado su actividad en los últimos años, según fuentes de la DGA. Entre las propiedades allanadas destaca el domicilio del intendente de Morrillo, señalado como un lugar estratégico para la operación ilegal.
En los procedimientos realizados en Orán y Aguas Blancas, la DGA y GNA decomisaron cerca de 150 toneladas de metales y más de 150 rieles ferroviarios. También fueron incautados grandes volúmenes de insumos de construcción, sanitarios y herramientas de alto valor, además de varios vehículos, armas y documentos considerados relevantes para la investigación en curso.
Se emitieron órdenes de captura contra dos personas por un presunto vínculo directo con la red de contrabando. Las autoridades han expresado que estos resultados reflejan el compromiso de la actual gestión en la lucha contra el contrabando y la evasión.
Tras los procedimientos, el Presidente destacó la importancia de estos operativos como parte de una política de control fronterizo exhaustiva. “El que las hace, las paga”, enfatizó Milei, reafirmando el compromiso del Estado en asegurar la integridad de las fronteras y sancionar severamente a quienes atenten contra la ley.
Los operativos en el norte representan un mensaje de disuasión y demuestran el fortalecimiento de la Aduana en el control de mercancías en áreas sensibles de frontera. La DGA destacó la cooperación con GNA como un elemento clave para enfrentar el desafío de combatir el contrabando y proteger la economía local.
Los próximos pasos de la DGA, indicaron fuentes internas, incluyen auditorías y controles más rigurosos en otras áreas limítrofes, con el objetivo de evitar el flujo ilegal de bienes que perjudica tanto al Estado como a los sectores productivos de la región.