CÓRDOBA (Corresponsalía) En una jornada que reunió a las diversas expresiones del kirchnerismo silvestre en algunos de los puntos neurálgicos del país, la militancia cordobesa K ocupó las calles de la capital provincial para brindar su apoyo a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. La marcha, que recorrió el trayecto más tradicional de las convocatorias callejeras en Córdoba y culminó con un acto sobre la Avenida General Paz, en el centro capitalino, fue la reunión más importante entre las que pudo organizar el kirchnerismo en la provincia más anti-K desde la llegada del Frente de Todos a la Casa Rosada en 2019. En la organización hablaron de diez mil personas.
La marcha K en la indómita capital cordobesa
Como en otros puntos del país, la convocatoria elevó consignas contra el lawfare y la “persecución a Cristina”, y tuvo entre sus principales protagonistas a la triada cordobesa que representa al Frente de Todos (FdT) en la Cámara de Diputados: Gabriela Estévez, Pablo Carro y Eduardo Fernández.
En una tarde que la lluvia, por momentos, tiñó de épica, también se sumaron intendentes y referentes del interior cordobés y figuras que revistan en el funcionariado como la titular del PAMI Córdoba, Olga Riutort; la presidenta de la Fábrica Argentina de Aviones (FADEA), Mirta Iriondo; el titular de la delegación local del Ministerio de Trabajo, Ignacio Basélica, y el director del Observatorio de Derechos Humanos del Senado, Martín Fresneda.
Aunque no fue de la partida en la calle, el sector que lidera Carlos Caserio también había sido parte de la defensa a la vicepresidenta en la previa a la marcha. Incluso, gran parte de la dirigencia que se sumó a las filas de la movilización forma parte del Frente Peronista Córdoba que se identifica dentro del PJ provincial con el vicepresidente del Banco Nación. Uno de ellos, que marchó a la cabeza de la movilización, fue el intendente de Pascanas, Rodolfo Filipponi.
También dijeron presente referentes de organismos de Derechos Humanos, organizaciones sociales y sindicales. Entre estos últimos, se destacó la presencia del Secretario General de la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC), Juan Monserrat. El jefe sindical tuvo una intensa actividad en las últimas horas, en las que el gremio que conduce es el único que todavía negocia con el gobierno provincial el porcentaje de la suba salarial que ya aceptó el resto del personal estatal.
En un documento que se leyó al finalizar la movilización, el kirchnerismo cordobés afirmó que la causa Vialidad persigue “el propósito de desprestigiar y proscribir a la principal dirigente política de nuestro país” y que, para tal fin, “no han dudado en construir falsas denuncias, sin pruebas fehacientes, vulnerando el derecho a la defensa y a la igualdad ante la ley”.
“Estas maniobras vulneran la vigencia de los derechos humanos, el republicanismo y la imparcialidad del servicio de Justicia”, señalaron, para afirmar a continuación que “ninguna operación mediático-judicial podrá borrar la memoria y el amor del Pueblo por la compañera Cristina, quien honró siempre el mandato de las urnas ampliando derechos y defendiendo los intereses de las mayorías populares”.