El impacto de la hipermediatización del juicio en la causa Vialidad, de las acusaciones cruzadas por corrupción y de la salida a las calles de los manifestantes a favor y en contra de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner golpeó con fuerza en el Círculo Rojo, que se vio salpicado por las declaraciones, en donde quedaron marcados algunos empresarios vinculados con la obra pública que no estaban presentes en el debate judicial. Pero, además, existe una preocupación ascendente por el derrumbe del efecto positivo en la economía que habían vislumbrado ante la llegada de Sergio Massa al Ejecutivo ante el ensanchamiento de la grieta política, que generará "ruido" en el clima de negocios, ya complicado por la crisis financiera.
Fuentes del establishment local confiaron a Letra P que la aparición el juicio que enfrenta la titular del Senado "es un tema que mete ruido en todo" el ámbito local, "no sólo en los negocios", sino que implica a "la política, las empresas y los gremios". La preocupación está centrada en dos partes que se tocan, pero que afectan por separado el clima empresario: por un lado, la vuelta al ojo de la tormenta de los constructores, luego de superar la crisis de la causa Cuadernos, en donde fueron implicadas las grandes firmas que integraban la denominada patria contratista; y, por el otro, la beligerancia que puede instalarse en las relaciones entre los actores del sector privado e, incluso, con el resto de la sociedad.
"El clima está enrarecido, más allá si fueron o no mencionados", apuntó un empresario, con la lupa puesta sobre algunos de sus pares vinculados con la Cámara Argentina de la Construcción, en referencia al expresidente de Camarco Juan Chediack, que fue señalado por CFK por haber mantenido relación vía WhatsApp con el exsecretario de Obras Públicas José López, condenado por corrupción. Las esquirlas del descargo público de la vicepresidenta llegaron a todos los sectores empresarios, pero generó "incomodidad" entre los constructores, según admitieron a este medio fuentes del sector, que días atrás recibió un fuerte respaldo de Massa, ante el lanzamiento del blanqueo de capitales para su uso en el sector.
Justamente, el dueño de una de las denominadas empresas grandes que se dedican a la obra pública, señaló a Letra P que desde la crisis ministerial que generó la salida de Martín Guzmán del Palacio de Hacienda, incluyendo la parálisis burocrática con la llegada de Massa, el sector había sufrido un retraso en los pagos por primera vez desde la llegada de Alberto Fernández a la Casa Rosada. "Estábamos viviendo en un mundo ideal, con una alta actividad, que permitió elevar a casi 500.000 los puestos de trabajo del sector, sumado a un pago en tiempo y en forma como no se vio nunca en el país. Y con mucha tranquilidad, porque la política no se interpuso en ningún momento", reflexionó.
"Toda la situación política que se ha generado en torno a este tema no ayuda para nada. Es más, va a traer muchos problemas al trabajo que había empezado a realizar Massa. Para que la economía funcione, se necesita tranquilidad, y lo que está pasando en estos días, con algunos pedidos de puebladas, algunos enfrentamientos, amenazas y todos eso, realmente complica muchísimo y retrae la expectativa interesante que había generado la asunción del ministro de Economía", le confesó a Letra P el jefe de una de las seis organizaciones que integran el G6, considerado el centro del poder productivo del país, integrado por la industria, la construcción, el mundo de las finanzas, el sector de la banca nacional, el campo y el comercio.
Los empresarios hubieran preferido un perfil bajo del debate judicial en el expediente Vialidad, pero la referencia de Cristina Kirchner como antecedente en donde los responsables finales de una sospecha de corrupción son las cabezas de los grupos, en el caso del gobierno la jefatura de estado, y en las empresas los dueños, dejó preocupación. Sucede que en la causa Cuadernos, algunos ceos quedaron absueltos por la admisión de culpabilidad de gerentes de alto rango en la estructura de su cargo, como sucedió en el Grupo Techint, en donde Paolo Rocca.
"Mete un poco de incertidumbre a todos el contexto general. Si bien la causa va por el carril de la Justicia, no deja de meter ruido en el medio de una situación muy sensible en todos los términos", admitió el dueño de una empresa que responde al poder de representación de la Unión Industrial Argentina (UIA). Allí consideran que las relaciones con los sindicatos, en algunos sectores, podría llegar a "enrarecerse" debido a las tensiones políticas. "El resurgimiento en el centro de la escena política de la figura de Cristina la vuelve a poner en carrera electoral, justo en los momentos en que el kirchnerismo había bajada el nivel de exposición ante la llegada de Massa al Gobierno", se lamentó otra fuente empresaria consultada.
Sucede que ahora creen que puede existir una carrera por demostrar la capacidad de acumulación en favor del peronismo, ante lo que consideran el ensanchamiento de la grieta con la oposición vinculada al expresidente Mauricio Macri y los integrantes más duros de Juntos por el Cambio. "Si se profundiza la discusión e identifican a los empresarios dentro de un lado de la grieta, las relaciones dentro del mundo privado pueden volverse tensas. Y eso también puede golpear hacia afuera de las empresas, por el impacto social", se lamentó el dueño de una empresa grande del país.