De las doce internas distritales que se libraban este domingo por la conducción de los PJ locales en la provincia de Buenos Aires, la de San Isidro es la que tiene vidriera nacional por los pesos pesados del Frente de Todos (FdT) que se enfrentan. Compiten dos listas: la encabezada por Patricia Castro, titular de la Anses local, que está apadrinada por el canciller Santiago Cafiero; y la que lidera el sindicalista de Sadop José Luis Casares, que tiene el respaldo del Frente Renovador de Sergio Massa a través del director del Banco Provincia Sebastián Galmarini, además de la senadora bonaerense Teresa García. El final es incierto; ninguno de los sectores se anima a vaticinar un resultado. Como contó Letra P, en los 123 municipios restantes se alcanzó lista de unidad, por lo que no hay enfrentamiento.
En el distrito gobernado por el radical Gustavo Posse (UCR), al peronismo le cuesta hacer pie y lograr concesos básicos. Es una de las tres internas que se disputaba en el conurbano.
Castro representa al oficialismo partidario, que tiene a Fabián Brest en la presidencia. La acompaña el exconcejal Juan Ottavis y en la nómina de congresales provincial, la directora nacional de Enacom Florencia Pacheco, el concejal Mateo Bartolini y la jefa de PAMI San Isidro, Juliana Brito.
La lista apadrinada por el canciller sufrió un fuerte golpe días atrás, cuando ocho dirigentes de la agrupación Militantes con Historia renunciaron a sus lugares en la lista por diferencias con la conducción. En el sector intentaron bajarle el tono a lo sucedido: “Son compañeros que cambiaron la manera de pensar y decidieron irse, no los vamos a estigmatizar por eso, ni vamos a salir a contestar”, dijo a Letra P un dirigente que reporta a Cafiero.
La candidata a congresal provincial Florencia Pacheco plantea un peronismo de continuidad para el distrito. “Queremos un PJ que siga teniendo acciones participativas, que sea abierto, que siga siendo un lugar de discusión y que trabaje por cada vecino y vecina. Las construcciones se hacen con militancia y dedicación”, dijo a Letra P, al tiempo que remarcó que el mejor camino es la unidad.
La lista de Casares lleva de candidata a vicepresidenta a la massista Liliana Burgos y al concejal Gastón Fernández, que responde a la senadora García, de postulante a la Secretaría general. Los dos primeros lugares de la lista de congresales provinciales fueron para el clan Galmarini. La encabeza Fernando Galmarini, seguido de Marcela Durrieu, padre y madre de la titular de Aysa Malena Galmarini, esposa de Massa.
Gastón Fernández, candidato a secretario general, aseguró a este medio que buscan “un Partido Justicialista más popular y abierto, en el que confluyan los diversos espacios”. “Por eso -dijo- nuestra lista es más amplia. Nuestro objetivo es 2023”. Adelantó que, de triunfar, convocarán a los integrantes de la otra lista, ya que creen en “un solo peronismo para San Isidro”.
La disputa es pareja y desde ningún sector se animan a aventurar un resultado a su favor. El sector de Cafiero cuenta con los fierros del PJ, tienen el apoyo de la CGT regional zona norte y confía en el trabajo de años, desde que el actual funcionario nacional presidió el partido en 2008. “Esto va a ser voto a voto”, dijo a este medio un hombre que reporta al canciller.
En la otra vereda confíaban en que la actualización de los padrones los beneficie porque son quienes más anclaje tienen en la juventud. Ven como un diferencial de peso la incorporación del Frente Renovador a la contienda. “En otras elecciones, éramos dos sectores muy similares en cuanto a estructura y la incorporación del Frente Renovador nos da otro volumen”, afirmó un miembro de la lista apoyada por García y Massa.
