La gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras, llegó al inicio del 51° período de sesiones ordinarias con la certeza de que 2022 estará atravesado por dos ejes: el desarrollo de energía limpias, a través del proyecto de Hidrógeno Verde, y la regularización de las tierras para comunidades mapuches, un conflicto que golpea a la Patagonia pero que tiene su epicentro en esta provincia. Para avanzar sobre ambas realidades, enviará proyectos a la Legislatura que le darán un marco regulatorio, según aseguró este martes en su discurso.
“Si Matías Kulfas no nos hubiera llamado, no podríamos competir con otras locaciones. A través del trabajo conjunto, avanzamos muchísimo en las negociaciones. Creemos que esto merece una mirada multipartidaria”, espetó la gobernadora en referencia al ministro de Desarrollo productivo, en la primera definición importante de su alocución, que tuvo como ejes el desarrollo urbano, la creación de nuevos hospitales y la planificación de la provincia con un horizonte en 2030.
Como anticipó Letra P, ordenó a sus equipos técnicos la redacción de un proyecto que regula el llamado a licitación para la generación de Hidrógeno Verde, la gran promesa de su gestión. Desde la gira del presidente Alberto Fernández por Escocia, en las jornadas sobre cambio climático en Edimburgo, Carreras recibió a los representantes de la australiana Fortescue para la creación de una planta en las inmediaciones de Sierra Grande, en la región atlántica. “Este es un paso fundamental y prioritario que Río Negro está encarando, hacia la construcción de un mundo más sustentable”, dijo este martes en Viedma.
Carreras hizo un repaso de sus primeros años de gestión.
Su segundo anuncio importante fue el envío de otro proyecto, el que pretende instrumentar la entrega de títulos de propiedad de tierras fiscales para quienes hace más de 20 años están viviendo en algún predio de pertenencia provincial. También se refirió a la situación de los pueblos originarios, un tema sin resolución que complica cada gestión local, sobre todo en la zona andina, entre los límites con Neuquén y Chubut. “El acceso de las comunidades originarias a los títulos de propiedad comunitaria será parte de esta política de tierras. Crearemos, en el ámbito del Ministerio de Gobierno y Comunidad, la dirección de Pueblos Originarios, que será el ámbito específico para la tramitación de estos títulos”, prometió.
“Esperamos que este proceso de titularización contribuya a clarificar los derechos de posesión de la tierra, pacificando y resolviendo los conflictos históricos y ofreciendo un camino legal para la posesión de las parcelas”, dijo.
El resto fue un repaso de lo realizado por el gabinete: seguridad y justicia, lucha contra adicciones, desarrollo humano, salud, educación, trabajo, energía, turismo producción y agroindustria. “Río Negro hoy es futuro, crecimiento, oportunidad y trabajo. No hay iniciativa posible que tenga éxito si no cala en las expectativas más profundas de nuestra gente”, auguró.
Cuando finalizaba la inauguración, en las afueras de la Legislatura se manifestaban grupos de pueblos originarios y representantes del gremio docente UNTER. Este miércoles y jueves, los sindicatos públicos llevarán adelante un paro. Será la primera gran medida de fuerza en contra de un gobierno de Juntos Somos Río Negro (JSRN) en mucho tiempo.