El Frente de Todos (FdT) sufrió en Morón una de las peores derrotas en municipios gobernados por el oficialismo en la provincia de Buenos Aires. En el tramo local, obtuvo 32% de los votos frente al 43% que sumaron las tres listas que compitieron en la interna de Juntos. Para la elección general del 14 de noviembre, el objetivo central del intendente Lucas Ghi es sumar un punto respecto de las PASO: si lo logra, retendrá las cinco bancas que pone en juego y seguirá mandando en el Concejo Deliberante. Para ello, incentiva el despliegue territorial para traccionar “de abajo hacia arriba”. Mientras tanto, un aluvión de funcionarios nacionales y provinciales, entre los que se cuenta al gobernador Axel Kicillof, desfiló por ese distrito de la Primera sección, región clave en el Plan Remontar con el que el oficialismo provincial busca la mayoría en el Senado.
Pese a contar con un bloque de once concejales y concejalas de un total de 24, el oficialismo controla y conduce el Concejo Deliberante (HCD) gracias a acuerdos logrados con bloques unipersonales. En esta elección, el FdT pone en juego cinco bancas y Juntos, siete. Si bien la expectativa en la previa de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) era sumar un concejal, tras la derrota el objetivo mutó a conservar las cinco que arriesga.
Quedó a un punto de esa humilde pretensión, pues si el resultado de las primarias se repitiera, el oficialismo perdería una banca a manos de la oposición y peligraría la presidencia del HCD. “Para sumar un concejal más e ingresar seis, debiéramos ganar la elección y con once puntos de diferencia abajo eso es muy difícil. Por eso, hoy el objetivo es retener las cinco bancas”, afirmó a Letra P un miembro del gabinete del jefe comunal.
En el entorno del intendente explican la derrota, principalmente, en el impacto de cuestiones relacionadas a la esfera provincial y nacional: la inflación, la seguridad; la foto del cumpleaños de la primera dama en Olivos o el vacunatorio VIP, son argumentos que se repiten.
“Hay una buena valoración de la gestión local y la imagen de Lucas (Ghi) es muy buena, pero el electorado de Morón es muy fluctuante, y está muy determinado por la agenda nacional”, explica un dirigente del FdT local a este medio. Es por eso que para achicar la diferencia y asegurarse, de mínima, un punto más es que trabajan en una campaña más localista, con fuerte despliegue territorial.
Según el análisis poselectoral, las zonas donde menos gente fue a votar son sectores más permeables al peronismo, “los sures”, como denominan a la zona sur de cada una de las localidades. Es allí donde principalmente irán a buscar los votos intensificando el trabajo que se hizo en la previa a las PASO y haciendo hincapié en la gestión local y la figura del intendente.
Un hombre cercano al jefe comunal explica que la campaña va a ser más en las casas que en la calle. Y que identifican lugares concretos y hacen reuniones no con los propios sino con los que tienen dudas o son más críticos. Como sea, reconoce que la tarea es difícil: “El de Morón es un electorado más reacio al peronismo, cuando ganamos lo hicimos por tres puntos y la situación nacional es muy condicionante, para bien o para mal”.
Visitas
En las últimas semanas, un aluvión de funcionarios nacionales y provinciales desembarcó en el distrito. Entre las visitas, se destaca la de Kicillof este martes. Recorrió un vacunatorio en el inicio de la campaña de inoculación para niños y niñas de entre 3 y 11 años.
Desde Morón, acompañado por Ghi y el titular de ACUMAR, Martín Sabatella, el gobernador anunció la vacunación libre de primeras y segundas dosis para todos los mayores de 18 años. “La libertad es la vacuna”, sostuvo, al tiempo que cuestionó la campaña “antivacunas” de la oposición.
Al distrito gobernado por Nuevo Encuentro ya habían arribado el ministro de Obras Públicas de la Nación, Gabriel Katopodis, y la titular de Aysa, Malena Galmarini. Este miércoles estará el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, y en las semanas previas pasaron figuras como la ministra de Mujeres, Géneros y Diversidades, Elizabeth Gómez Alcorta; la titular de PAMI, Luana Volnovich; el ministro de Educación, Jaime Perczyk; el ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Jorge Ferraresi; y la ministra de Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la provincia de Buenos Aires, Estela Díaz.
Pese a que dirigentes del municipio creen que -en gran medida- la derrota se debe a la coyuntura nacional, niegan que se vaya a trabajar en el corte de boleta. “Eso no sirve, y Morón va a ser escenario de funcionarios nacionales y provinciales, nosotros somos parte de un proyecto, pero hoy está mejor posicionado Lucas (Ghi) que Axel (Kicillof) o Alberto (Fernández). Por eso tenemos que traccionar al revés”, explican.
La presencia de gran cantidad de funcionarios bonaerenses y nacionales se explica en la necesidad del Frente de Todos de levantar la performance en la Primera sección -a la que pertenece Morón-, donde se eligen representantes para la Cámara de Senadores, el talón de Aquiles del gobernador Kicillof.