Sabor agridulce tienen las empresas frutícolas del Alto Valle de Río Negro y Neuquén por el anuncio de asistencia que oficializó el gobierno nacional. La gestión, que apunta a los pequeños y medianos productores, ya es analizada por las exportadoras que integran la Cámara Argentina de Fruticultores Integrados (Cafi), que tienen un ojo puesto en el reclamo de los sindicatos que integran la cadena por el 50% de zona desfavorable. Tres gremios anunciaron protestas de agosto a noviembre, cuando falte poco para la cosecha 2021.
La noticia se esparció en las primeras horas de este jueves, cuando el Boletín Oficial anunció el esperado auxilio a los productores de los valles. El denominado Programa de Asistencia de Emergencia Económica, Productiva, Financiera y Social busca llevarles un poco de aire a los asfixiados chacareros norpatagónicos, de San Juan y Mendoza. Según voceros del Gobierno consultados por Letra P, el plan apunta a beneficiar productores, empacadores, comercializadores, industrializadores y frigoríficos, al igual que “proteger” las pymes.
Ratificado en el decreto 615/2020, se postergaron todos los vencimientos de “obligaciones de seguridad social que operen hasta el 31 de diciembre de 2020”. Otro de los puntos destacados, y que más les importa a los productores, es la suspensión de juicios de ejecución bajo la órbita de la AFIP.
El anuncio llegó en un momento clave, cuando el malestar de algunos sectores empezaron a tomar fuerza. La Federación de Productores, al igual que CAFI, están atentos a cómo juegan los sindicatos en esta etapa. De igual forma que informó este medio, Uatre, los obreros empacadores y del hielo, pensaron una hoja de ruta de protestas para que se les garantice, en este proceso, el 50% por zona desfavorable. El plan tiene respaldo legislativo del diputado nacional Pablo Ansaloni, quien integra el consejo directivo nacional de los obreros rurales.
Como describió Ansaloni, hay iniciativa del bloque federal del mendocino José Luis Ramón. El proyecto lleva la firma del rionegrino Luis Di Giácomo, de Juntos Somos Río Negro (JSRN).
La primera movilización, que terminó en la sede del Ministerio de Trabajo en General Roca, alertó a los empresarios. En Cafi, la cámara patronal, anticiparon que es inviable esa idea de ingresos para los trabajadores que operan en sus plantas de empaque.
Los secretarios generales Antonio Bobadilla (Sthimpra), Marcos Bielma (Soefrnyn) y José Liguén (Uatre) firmaron un comunicado que anticipa protestas en diferentes puntos de la región. La próxima está prevista para el 12 de agosto en San Patricio del Chañar, Neuquén. A mediados de septiembre, habrá una en Cipolletti; en octubre se pensó otra para Cervantes y, muy cerca de la cosecha, a mediados de noviembre, se anunció una movilización en Allen.
PLAZO. Facundo López, jefe de la bancada oficialista en Río Negro, manifestó su satisfacción por el programa de asistencia a la cadena de peras y manzanas. De igual forma, aseguró que "el problema de la fruticultura es estructural, de fondo", y reclamó una acción en conjunta entre el gobierno provincial y nacional, "junto con todos los actores públicos y privados que integran nuestra principal economía regional", para desarrollar "una propuesta sólida a mediano y largo plazo para la misma".