Se agudiza la crisis del empleo en territorio bonaerense. En esta oportunidad, más de una veintena de trabajadores que se desempeñaban en la línea de producción del tradicional untable Mendicrim, fueron despedidos a partir del cierre de la planta ubicada en la localidad de Arenaza, en el distrito de Lincoln. La producción, en tanto, se trasladará a Brinkmann, en Córdoba.
Se trata de 22 operarios que realizaban tareas en ese complejo perteneciente a Alimentos Refrigerados S.A (ARSA), empresa creada por la familia Vicentin que en 2016 también se había hecho con las unidades de yogures, flanes y postres de Sancor.
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A partir de un acuerdo, en esa planta seguían trabajando los empleados a cargo de Sancor en la línea de producción de Mendicrim, en un comodato entre ambas empresas que vence al finalizar este mes.
Desde el gremio pidieron al Ministerio de Trabajo bonaerense una solución para los empleados. Sin embargo, durante la reunión entre las partes, se les ofreció a los trabajadores la opción de un retiro voluntario y una relocalización, algo que no prosperó, por lo que se tomó la decisión de informar a los empleados que a fin de mes deberán retirarse de la planta y que les pagarán indemnizaciones.