En lo que constituye el primer paso del diálogo social que busca imponer en el comienzo de su gobierno el presidente electo, Alberto Fernández, dirigentes de la Unión Industrial Argentina (UIA) y de la Confederación General del Trabajo (CGT) coincidieron este lunes en descartar la posibilidad de que se pague un bono de fin de año a todos los trabajadores.
José Urtubey, dirigente de la central fabril, señaló que es "muy difícil" que las empresas puedan hacer frente a dicho pago y explicó que el sector termina un año que constituye "un desastre que era anunciado".
Según dijo en declaraciones a radio La Red, el próximo Gobierno deberá centrarse en priorizar la regeneración de "los créditos productivos" de modo de encontrar "un cebador para encender la economía".
En tanto, el dirigente cegetista Héctor Daer descartó la posibilidad de que la central obrera reclame el pago universal de un bono extraordinario al reafirmar que el reclamo deberá evaluarse sector por sector, y que, "donde la actividad dé, el sindicato lo pedirá".
"No estamos en un momento de puja distributiva; estamos en un momento de sobrevida. Donde la actividad dé para pedir un bono, el sindicato lo pedirá. Estamos en una situación que no es normal", aseveró uno de los secretarios generales de la CGT en entrevistas concedidas a las radios La Red, FutuRöck y El Destape.
En este sentido, Daer fue categórico al señalar que no habrá un bono extraordinario de fin de año "de características universales" sino que la definición será sector por sector, en función de la situación en la que se encuentra cada una de las actividades.
De hecho, recordó que aún hay sectores en los que no se completó el pago completo de la asignación no remunerativa de $5.000 para todos los trabajadores en relación de dependencia que, en septiembre pasado y tras la devaluación del peso luego de las PASO, dispuso el Poder Ejecutivo a través de un decreto.
Por otro lado, Daer destacó la necesidad de "incrementar los ingresos en la base de la pirámide social" y sostuvo que, tras la asunción de Alberto Fernández, "se va a apuntar a la recuperación rápida de ingresos en los sectores más postergados", aunque prefirió evitar "ponerle rótulo" a la forma que tomará esa medida.
Por otro lado, rescató en relación con el plan Argentina Contra el Hambre el hecho de que "un presidente proponga políticas de Estado no el día que se va sino antes de asumir su primer mandato" y consideró que ese hecho "hace ver que las cosas van a ser en serio".
Por otro lado, Daer entendió que "más allá de la formalidad institucional" en cuanto a una reunificación de la CGT, lo importante era señalar que "todas las organizaciones sindicales son parte del proceso político que viene", con un "compromiso de fortalecer este camino hacia adelante".
En ese marco, consideró "un poquito apresurado" que algunas organizaciones sociales hayan ya advertido a Fernández que se movilizarán en caso de no encontrar respuestas a sus demandas.
"Les recomendaría que el día que tengan que reclamar y visibilizar sus protestas, lo hagan con total naturalidad, en el ámbito democrático, pero planteárselo antes de que asuma el presidente, es un poquito apresurado", evaluó.