Como un deja vú, la reunión posterior al encuentro entre los industriales y el Gobierno Nacional fue un calco del encuentro que esos mismos industriales tuvieron entre ellos días antes del llamado oficial de La Rosada para aplacar los ánimos. Se reafirmaron las quejas sectoriales por temas de importaciones y competitividad, al igual que los reclamos al Gobierno para solucionar los problemas de fondo. Con mayor calma en el tono, se coincidió en darle al oficialismo una especie de tregua de entre 10 y 15 días para que convoque a las mesas sectoriales que prometieron el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el titular de Producción, Francisco Cabrera, en el café que compartieron en Gobierno.
Miguel Acevedo, el presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), fue el anfitrión del encuentro de Junta Directa de la entidad, y llevó la voz cantante para relatar las alternativas del mitin con los funcionarios. “Les quiero aclarar que fue algo netamente institucional, no se habló de los temas sectoriales”, detalló el dirigente de Aceitera General Deheza (AGD). Fue por eso razón que fue acompañado de Daniel Funes de Rioja, de la Copal, y Luis Betnaza, de Techint; y no por dirigentes de la pequeña y mediana empresa, los que tienen mayores quejas por el ritmo de las importaciones y la marcha de la economía en general. El empresario aseguró que “tenemos algunas dudas respecto a cómo se van a implementar las mesas sectoriales, si el Gobierno va a eliminar las que ya existían, si va a participar el presidente o no”. Es que hasta el momento, en algunas mesas como la del sector maderero, había encuentros con gobernadores y hasta se sumó el propio Mauricio Macri. Por no haber tenido convocatoria oficial a charlar estos temas, la UIA definió un plazo perentorio para recibir un llamado y por trabajar de lleno en estos temas.
Las quejas más fuertes por lo que consideran una crisis sectorial partieron de dos cuadros de la entidad. Por un lado, Miguel Calelo, un empresario del software que integra la UIPBA; y del lado del textil Jorge Sorabilla. “Los problemas siguen, esto tiene que quedar claro”, disparó uno de ellos. Además, aclararon que “la foto con el Gobierno estuvo bien, había que bajar un cambio, pero ahora es el momento de las soluciones”.
En la previa a la reunión general en la sede de Avenida de Mayo, se juntaron por separado los dirigentes de las dos listas que reinan en la UIA: la Celeste y Blanca y los Industriales. Todos coincidieron en que es necesario trabajar de forma urgente los problemas de fondo. Tanto que hasta el propio Acevedo se abrió una cuenta en la red social Twitter para estar activo en las redes y colar el mensaje que quieren que escuchen y lean en el oficialismo.