SINDICATOS

Los laboralistas se unen para darle pelea a la política del Gobierno

Los principales estudios de esa rama, que representan a los sindicatos, denuncian la violación sistemática de los derechos de los trabajadores en la era Cambiemos.

La política oficial de intervención de gremios y la eliminación del rango de ministerio de la cartera laboral fueron el detonante de un alineamiento poco habitual en el mundo del derecho laboral. Los estudios laboralistas, representantes de los sindicatos más poderosos del país, se aprestan a anunciar públicamente la conformación del Foro de Abogados y Abogadas de Organizaciones Sindicales.

 

"Denunciamos la sistemática violación de la libertad y la democracia sindical por parte de este gobierno", acusa el documento firmado por Hugo Moyano (Camioneros), Ernesto Segal (Sanidad), Adolfo Matarrese (Alimentación), Luis Ramírez (Pilotos), Héctor RecaldeGuillermo Gianibelli (Subte), Noemí Rial (Unión Ferroviaria), Gustavo Ciampa (La Bancaria), Carlos Zamboni (Ceramistas), Matías Cremonte (Aceiteros), Mariana Amartino (ATE), Juan Manuel Martínez Chas (Dragado y Balizamiento), Verónica Quinteros (CONADU Histórica), Leandro Macía (CONADU), Álvaro Ruíz, el ex ministro de Trabajo Enrique RamírezHéctor García (CTERA), entre otros.

 

Los nombres dan cuenta de la confluencia de todas las tradiciones políticas, desde la ortodoxia hasta las expresiones más combativas del mundo gremial, pero también de la amplitud de las identidades políticas que incluye a las organizaciones afines al kircherismo como a los sectores de la izquierda.

 

Dejando de lado viejas rencillas y disputas por el control de las asociaciones que los agrupan, los letrados se unieron para denunciar "la utilización política de la autoridad de trabajo y de parte de la justicia federal penal con el fin de criminalizar a la organización sindical y obstaculizar el ejercicio de los derechos sindicales constitucionalmente garantizados".

 

El documento, que se conocerá este viernes, contiene una crítica lapidaria en la que consideran que hoy es "una utopía" ejercer de manera regular los derechos sindicales básicos.

 

Entre los principales expresiones de la violación "sistemática" de los derecho laborales, resaltan la eliminación del Ministerio de Trabajo, las intervenciones a las entidades sindicales y la utilización de sus recursos por parte de los interventores nombrados por el poder político y/o judicial.

 

Pero también denuncian la persecución política contra dirigentes, abogados y jueces del trabajo y la aplicación de multas arbitrarias con fines de atentar contra la libertad sindical.

 

Respecto de los problemas de los letrados, señalan la existencia de "inaceptables trabas para el ejercicio de nuestra en el ámbito de la autoridad administrativa laboral".

 

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