Tras hacer público su descontento por el revalúo en el impuesto rural inmobiliario, directores bonaerenses de la Federación Agraria Argentina se reunieron con el ministro de Asuntos Agrarios de la provincia de Buenos Aires, Leonardo Sarquís, para transmitir la preocupación del sector ante las modificaciones.
"Si todo esto avanza, a muchos se nos hace inviable seguir en actividad. Tras las dramáticas situaciones de emergencia que atravesamos, estas medidas terminarían de quitarnos toda posibilidad. Es alarmante que los cambios que se proponen a nivel provincia -que no contemplan escalas ni progresividad, salvo una aislada excepción- serán seguidos por una reforma a nivel nacional con las mismas definiciones”, manifestaron los directores que se reunieron con el ministro del equipo de María Eugenia Vidal.
El encuentro fue solicitado con carácter de urgente por el presidente de FAA, Omar Príncipe, durante su visita a las entidades del sudeste bonaerense el pasado sábado, luego de que los productores le expresaran una fuerte preocupación por las modificaciones al inmobiliario rural y otras cuestiones que generan incertidumbre acerca de su futuro como productores. Los federados manifestaron este reclamo en las recientes reuniones de sus Consejos de Delegados Regionales realizados en General Alvear y en Tandil, en las que el presidente de FAA estuvo presente.
Los ruralistas presentaron a Sarquís y a otros funcionarios bonaerenses los cuestionamientos y propuestas ante la modificación del impuesto inmobiliario rural e hicieron llegar a las autoridades otros reclamos vinculados con la demora en relación con los créditos para la producción porcina, el mal estado de los caminos rurales y la dilación para conformar Comisiones de Emergencia en varias localidades. Además, le solicitaron la quita del llamado impuesto "complementario" y criticaron que varios municipios anunciaran subas desmedidas de tasas locales.
“Es menester una reforma fiscal. Los impuestos deben ser equitativos y aplicados de forma progresiva; la tierra que se trabaja no es una exteriorización de riqueza sino un medio de producción”, señalaron los productores en un documento y si bien rescataron “algunos avances en relación a la carga impositiva que se aplica a las pequeñas chacras”, cuestionaron que se proponga “un aumento del 107% del Impuesto Inmobiliario Rural en estos dos años, y que para su cálculo se aplica, actualizada, la misma tabla impuesta por la administración que escondía, bajo una supuesta progresividad, una voraz agresividad fiscal, proporcionalmente mayor a las unidades económicas de cada región”
En esa línea, remarcaron que “la estabilidad de los precios de los que producimos choca contra el aumento de nuestros costos. También contra el incremento de costos que debemos asumir cuando el Estado (municipal, provincial o nacional) se ausenta. Caminos, seguridad, educación, conectividad, administración, son necesidades que los productores vamos satisfaciendo cada vez con mayor esfuerzo propio”.
Durante la reunión, según expresaron los productores, el ministro Sarquís planteó que la excepción del aumento se mantendría para las superficies menores a 50 hectáreas y/o con valor fiscal de 3 millones de pesos. Y ante el planteo de los federados sobre el revalúo, indicó que se estaría negociando una prórroga para los productores que aún no presentaron sus partidas.