El presidente Mauricio Macri está a un paso de regresar a Buenos Aires de su gira por la ciudad de Hangzhou, China, para participar de la onceava cumbre del G-20. En parte de su equipo se respira cierto optimismo,un reflejo habitual para una administración que logra grandes elogios afuera y duras críticas adentro del país. Cuando pise de nuevo el suelo patrio, el mandatario habrá vuelto a la realidad que promedia al segundo semestre, pero tendrá en el bolsillo algunos réditos simbólicos: los elogios del presidente de los Estados Unidos Barack Obama a su gestión y el apoyo explícito del presidente de China Xi Jinping a la candidatura de la canciller Susana Malcorra en las elecciones de secretario general de la Organización de Naciones Unidas.
Los mensajes de ambos presidentes refuerzan la idea de que la Argentina podría estar en el radar de las dos potencias, pero las señales del exterior todavía no tienen un impacto directo en la realidad económica local. Las espadas optimistas del gobierno posdatan ese impacto al año que viene, pero por fuera de los gestos públicos, Macri transitó todo su recorrido oriental con las críticas industriales al hombro, especialmente en contra del reconocimiento argentino a China como economía de libre mercado, un asunto que el G-20 definirá en diciembre. Para liberar la presión el mandatario chino le propuso buscar algún alivio al déficit comercial que tiene la Argentina con la potencia asiática, mediante el incremento del turismo oriental en tierra criolla.
Aunque en la cumbre estuvieron los líderes de las principales potencias industriales y comerciales del mundo Macri hasta ahora sólo pudo reunirse con el dueño de casa y no logró encontrarse con el presidente ruso Vladimir Putin por un retraso en su vuelo proveniente de Moscú. La agenda incluye dos reuniones este lunes con los mandatarios de España, Mariano Rajoy, y de la India, socio clave del BRIC, Narendra Modi.
DESPEDIDA DE OBAMA. "Las economías crecen mejor cuando todos participan de ese crecimiento. Tenemos que tomar medidas para asegurarnos que no vamos a tomar nuevas recetas proteccionistas ni populistas. Hay varios presidentes que están tomando medidas correctas, como en India, Indonesia o Italia, el nuevo presidente de la Argentina", que lo ha hecho "para rediseñar y darle nueva fuerza a su economía", interpretó Obama ante el mayor foro de coordinación de economía y finanzas globales donde han sido duramente cuestionadas las políticas neoliberales que ahora impulsa Macri en su gestión. El espaldarazo del jefe de la Casa Blanca fue durante su última intervención frente al foro internacional (creado luego de la crisis mundial de las sub prime en 2007), ya que transita los últimos meses de su segundo mandato.
La ruta de las reuniones previstas confirmaron que la orientación de la gira estuvo más concentrada en China y Asia, que en Estados Unidos. Con un tono vendedor, Macri buscó diferenciarse del que le imprimió su antecesora Cristina Fernandez de Kirchner en las cumbres del G-20. Ahora, nada de críticas al capitalismo global y a los fondos buitres, justo en un momento donde el foro va en ese sentido.
"En la Argentina empezó una nueva etapa porque dejamos atrás una década de aislamiento del mundo para apostar a ciclos virtuosos de inversiones”, arengó Macri en la cumbre del Business 20 (B20). "En pocos meses hemos logrado ordenar nuestra economía, levantar el cepo, resolver los problemas de deuda, eliminar trabas a exportación y hemos lanzado el plan de infraestructura más importante de la historia que incluye caminos, puertos y energía. Queremos ser parte de las soluciones globales a los conflictos que aparecieron en el mundo: el narcotráfico, la pobreza, el crimen organizado y la lucha contra el cambio climático”, repitió el presidente.
PAÑOS FRIOS CHINOS. El espaldarazo de Obama fue posterior al encuentro bilateral entre Macri y su par Jinping, que tomó el guante de las críticas industriales argentinas ante el déficit comercial con China. "La situación es compleja y cambiante en estos tiempos y en ese contexto cooperamos con la Argentina” porque “somos socios estratégicos y sabemos lo de la balanza . No buscamos superávit, es una situación momentánea que esperamos ir corrigiendo y nosotros queremos más productos argentinos en el mercado chino”, prometió el mandatario chino, en un guiño a Buenos Aires para preservar la relación bilateral.
Otro punto fueron las correcciones en los acuerdos firmados para la construcción de una estación espacial china en Neuquén. La nueva formulación deja afuera los fines militares. Será sólo de uso civil tal como ahora acordaron ambos mandatarios en un texto que deberá ser refrendado por el Congreso.
Además de pronunciar su apoyo a la candidatura de Malcorra, el dueño de uno de los 5 vetos del Consejo de Seguridad de la ONU lo invitó a Macri a Beijing. “Espero que el año que viene podamos recibirlo formalmente en la primera visita de Estado y avanzar en las relaciones de nuestros países”, le propuso Jinping a Macri. “Para nosotros es muy importante la relación de ambos países porque consideramos que somos absolutamente complementarios”, cintureó Macri sin hablar de cuestiones vinculadas a la industria.
Por fuera de la agenda comercial, la estrategia de acercamiento a China también tiene un paquete de visados especiales para la promoción del turismo. "Hemos avanzado para que cualquier ciudadano chino que tiene visa para ingresar a Estados Unidos o a Europa pueda hacerlo al país. Por ahora ese visado es por cinco años pero queremos extenderlo o hasta anular la visa” prometió el mandatario argentino durante la reunión con su par oriental con el objetivo de promover el ingreso de un millón de turistas chinos al país.
LAS ÚLTIMAS FOTOS. Antes de dejar la ciudad china de Hangzhou, Macri hablará en el tercer y cuarto panel del plenario del G20 y luego tendrá dos reuniones bilaterales con el jefe del Gobierno español Rajoy y con el primer ministro indio Modi. Antes de llegar a tierra asiática Macri visitó al brevemente en Doha al emir de Qatar, Tamim bin Hamad Al Thani, para devolver la visita que hizo el qatarí a Buenos Aires en junio pasado. Durante las rondas del G20 Macri también se reunió con su par de la República Árabe de Egipto, Abdel Fattah Al Sisi. Hablaron de "temas agrícolas, el uso pacífico de la energía nuclear y la lucha contra el terrorismo informó la Casa Rosada.
Además de Macri y Malcorra, la delegación argentina está integrada por el ministro de Hacienda Alfonso De Prat Gay, el secretario de Asuntos Estratégicos Fulvio Pompeo, y el vicecanciller y secretario de Relaciones Exteriores Carlos Foradori.