Luego que el Senado de Brasil aprobara el juicio político a la presidenta Dilma Rousseff, quien este jueves dejará el gobierno en manos del vicepresidente Michel Temer por hasta 180 días, el Gobierno de Mauricio Macri manifestó que "respeta el proceso institucional" y dijo confiar que el "desenlace" de esta situación consolidará "la solidez de la democracia" del país vecino.
"El Gobierno Argentino continuará dialogando con las autoridades constituidas a fin de seguir avanzando con el proceso de integración bilateral y regional", sostuvo la Cancillería, minutos después de la suspensión por 180 días de la mandataria brasileña, evitando expresiones de respaldo a la situación institucional que se enfrenta la mandataria.
El Senado aprobó esta mañana el juicio político a Rousseff por el "delito de responsabilidad", derivado de modificaciones en las cuentas públicas, y ahora quedará a cargo del Poder Ejecutivo el vicepresidente Michel Temer.
En un comunicado de prensa, el Gobierno nacional sostuvo que ante los "sucesos registrados" en Brasil "manifiesta que respeta el proceso institucional que se está desarrollando" en ese país y "confía en que el desenlace de la situación consolide la solidez de la democracia brasileña".
La canciller Susana Malcorra replicó el escrito oficial a través de su cuenta personal de Twitter. El juicio político contra la suspendida mandataria fue aprobado tras 18 horas de sesión ininterrumpidas, en la que 55 senadores votaron a favor del impeachment y 22, en contra.
Días antes de asumir al frente del Ejecutivo, Macri viajó a Brasil para reunirse con Rousseff y allí hablaron sobre el proceso judicial que enfrentaba la mandataria, pero se negó a tomar posición y manifestó su "confianza en las instituciones de ese país".