Piden medidas anticrisis

Productores volvieron a tirar toneladas de fruta en el Alto Valle

El reclamo más importante fue en el paso de Río Negro a Neuquén, en Cipolletti. Se acrecienta el conflicto en la provincia.

Nuevamente productores del Alto Valle de Río Negro y Neuquén protestaron en las principales rutas de ambas provincias por la falta de respuestas ante la crisis que golpea al sector. Como se había anunciado, la decisión de arrojar toneladas de peras y manzanas surgió por la presión que reciben de las empresas exportadoras que marcan el precio de la fruta.

 

Otra jornada complicada se vivió en las principales rutas del norte patagónico. Mientras los conductores llegaban a la capital neuquina pudieron observar como tractores descargaban en el asfalto kilos y kilos de peras o manzanas.  El objetivo, según explicaron, es que desde Capital Federal tomen nota de la “asfixiante” realidad en la que viven.

 

Como describió Letra P, luego del impacto de la protesta la semana pasada, chacareros del Valle empezaron a golpear las puertas de los municipios para que entiendan el golpe negativo en la economía local.

 

En Allen, localidad cercana a General Roca y a General Fernández Oro (uno de los mayores focos de reclamo), hubo una demanda de ayuda con la similar cantidad de peras en la calle. El que había “nacionalizado” el conflicto fue el presidente de la Cooperativa de Productores de Fernández Oro, Edgardo Artero, al apuntar contra la provincia de Río Negro y el gobernador, Alberto Weretilneck, por las políticas hacia el sector. “No hizo nada por nosotros”, advertía.

 

Francisco Bezich, presidente de la Cámara de Productores de Cipolletti, fue otro de los que se descargó contra el conductor político de la provincia. “Nos ha abandonado en este último tiempo”, dijo para imitar al otro dirigente rural.

 

Como mediador, y por su buena relación con el presidente de la Nación, Mauricio Macri, el intendente Aníbal Tortoriello (Cipolletti) acompañará a representantes de las cámaras que este miércoles fueron los protagonistas por desechar tamaña cantidad de fruta.

 

El eje del conflicto surge por el monopolio que mantienen las grandes corporaciones. Para los productores un kilo de pera sale 4 pesos que, como explicó el dirigente de Fernández Oro, las empresas exportadoras pagan –como máximo– 2 pesos. Para el nivel industrial (jugo y otros derivados) se alcanza los 15 centavos.

 

Gracias a este poco rentable destino hoy, en el Alto Valle, hay 1300 productores de 6 mil que había hace dos décadas.

 

Gobernadores de la Patagonia. 
El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck.

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