Durante su Congreso de Delegados, la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la provincia de Buenos Aires (CICOP) resolvió ratificar el programa de reclamos e iniciar un plan de lucha instalando las demandas mediante afiches y actividades de difusión, comenzando por una jornada de protesta para el 17 de febrero.
En diálogo con Letra P, el titular de la mencionada entidad gremial, Fernando Corsiglia, recalcó que los objetivos de esta determinación “son muy claros” y que están basados en la solicitud “de llamado a paritarias que no tenemos, pidiendo participar de la general, lo que empezaría este 3 de febrero y luego la sectorial, la de nuestra ley, y también un pedido de aumento salarial que tiene en nuestra observación un piso del 40 por ciento, en un contexto de la continuidad de la crisis del sistema de salud pública”.
En cuanto a esto último, plantearán también una cláusula de revisión o automática “porque creemos que las paritarias deben quedar abiertas o reabrirse a mitad de año” y que, a la vez, “no se discuta sólo salario, sino de manera sistemática condiciones de trabajo”.
Manifestando “preocupación” con respecto a diversos servicios de distintos hospitales que han sido cerrados por falta de profesionales, Corsiglia subrayó que “las problemáticas básicas de recursos humanos y episodios de violencia subsisten”.
Otro de los reclamos que figuran en carpeta para CICOP es la disposición de un presupuesto de emergencia para el área de salud en territorio bonaerense. Aquí, el titular del gremio médico provincial trazó las diferencias entre este pedido y una declaración de emergencia en la materia.
“Nosotros entendemos que la salud está en emergencia desde hace años, es en gran parte una situación crónica. No pedimos una declaración de emergencia, lo que sí pedimos es un presupuesto de emergencia, un agregado a lo que se aprobó en la Legislatura a principios de año porque entendemos que el valor aprobado es notablemente bajo, igual que en los años anteriores y condena al sistema de salud a una situación muy problemática, sobre todo en la segunda parte del año”, advirtió Corsiglia.
Y añadió: “Con respecto a la declaración de emergencia en salud, la mayor parte de las veces los funcionarios la utilizan para disponer del personal, y nosotros no necesitamos que se disponga del personal que existe y que trabaja, sino que necesitamos que se inyecte nuevo personal en los distintos lugares porque eso es lo que falta”.
En principio, la jornada de lucha no contempla el cese de actividades, aunque el titular de CICOP detalló que “una de nuestras resoluciones es coordinar con el resto de los gremios estatales, en particular con ATE, las medidas a seguir en forma conjunta”, razón por la cual admitió que “estaría dentro de nuestras posibilidades” sumarse al paro nacional que ATE estipula realizar durante el mes de febrero. “Si podemos coordinar medidas comunes lo vamos a hacer”, puntualizó.