Ingresó a la Cámara de Diputados de la mano de Raúl Castells, en sociedad con los peronistas díscolos, armó un monobloque y terminó siendo una pieza clave para el kirchnerismo. Ramona Pucheta terminará su mandato como diputada en el mes de diciembre y buscará renovar su banca de la mano del Frente para la Victoria, aunque según dice pretende “conservar la identidad” de su espacio.
“Nosotros queremos mantener este proyecto que hizo lo imposible por incluir a tantos compañeros. Pero no voy a dejar de ser monobloque. Vamos a ver en qué lugar nos toca estar”, dice Pucheta. La diputada espera el cierre de listas para saber en qué lugar le tocará jugar. Si bien Pucheta es diputada por la provincia de Buenos Aires, nació en el Chaco y milita en Lomas de Zamora, por lo que podría llegar a competir en cualquiera de los tres distritos, aunque en el caso del municipio quedaría relegada a la competencia local.
La diputada ingresó al Congreso en la elección 2011, con la alianza que había conformado el Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados (MIJD), de Castells, con Alberto Rodríguez Saá y que llevó al puntano como candidato a presidente. Pero la relación entre Pucheta y el líder piquetero se rompió hacia fines de 2013, cuando la diputada denunció a Castells por “injurias, hostigamiento y violencia de género”, luego de que el titular del MIJD la acusara de haber recibido beneficios de parte del oficialismo por haber votado favorablemente el proyecto oficial. “No me compraron. Sigo viviendo en el mismo asentamiento (Villa Albertina) desde que vine a Buenos Aires, hace 28 años”, respondió. El voto de Pucheta fue determinante para el kirchnerismo en la aprobación del presupuesto 2014 y en el quórum que necesitaba el oficialismo para aprobar el nuevo Código Civil.
Poco después, Pucheta abandonó a los diputados del peronismo disidente y armó su monobloque. Además abandonó el MIDJ y formó su agrupación, Frente por la Inclusión Social (FIS). La siguieron gran parte de los militantes que estaban con el piquetero. Ahora Pucheta maneja una organización con representación en ocho provincias, pero que tiene principal asiento en la provincia de Buenos Aires, más precisamente en los municipios que forman la Tercera sección electoral. En función de esta capacidad de movilización, Pucheta espera ahora negociar su lugar en alguna de las listas del Frente para la Victoria en la provincia. En el escenario nacional, acompañó a Agustín Rossi hasta que el ministro de Defensa resolvió bajarse de la carrera presidencial.
En territorio bonaerense, aún no definió con cuál de los precandidatos jugará. Mantiene una excelente relación con Sergio Berni – que puede llegar a ser compañero de fórmula de Julián Domínguez - y dialoga con Aníbal Fernández. “Si uno quiere firmeza en la provincia, el candidato es Aníbal. Si quiere flexibilidad y diálogo es Julián”, define.