El verano empezó con vientos de cambio en el Frente Renovador bonaerense. El primer día del año, Massa anunciaba la llegada a su espacio de los diputados provinciales, Mauricio D’Alessandro y Guillermo Britos. Ambos legisladores habían sido compañeros de bloque de Mónica López en el bloque Unión Celeste y Blanco el cual presidió hasta que se fue al Frente Renovador, a principios del 2013. Sin embargo ni Britos ni D’Alessandro pasarán oficialmente al bloque del FR al menos por el momento.
“Siempre me cachetearon, así que me doy el lujo de renunciar” avisaba en los primeros días de enero del 2013, Mónica López para explicar de alguna forma su desvinculación de lo que era el armado denarvaísta. Pero el tiempo pasó y las fichas se acomodaron. Hoy Mónica López también aparecería alejada del Frente Renovador.
Al desembarcó de Britos y D’Alessandro se le sumó –para disgusto de López- el arribo de Francisco De Narváez. El diputado nacional llegó activo al Frente Renovador. Se sabe que las campañas salen plata y el Colorado aterrizó con la intención de ser candidato firme del massismo, por ello ya empieza a moverse entre los intendentes de la mesa chica del Frente Renovador: Eseverri, De la Torre y Katopodis. Con todos ellos se mostró en este último tiempo. López optó por hacer base en la costa atlántica para su campaña “Renovar las Energías”.
Cuando los primeros precandidatos a gobernadores empezaron a aparecer en el massismo, Mónica López se postuló como una más. Llegó a la cumbre que Massa organizó a fines del año pasado para definir, entre otras cosas, que cada candidato podrá llevar un referente en todos los distritos bonaerenses. En aquella reunión no estuvo ni De Narváez, ni Martín Insaurralde. Lo que significó un alivio para más de uno.
Pero el tiempo pasó, De Narváez ya es un precandidato más del Frente Renovador y Martín Insaurralde –que está vacacionando luego de un enero de campaña en la Costa- dice que a la gente no le interesa si va con Scioli o con Massa, pero a la par se muestra con un intendente massista.
En enero, también llegaron las declaraciones Gustavo Posse. El intendente de San Isidro sugirió que Massa podría ser vicepresidente de Macri por el hecho de que el ex presidente de Boca gobierna la ciudad de Buenos Aires, y le hace frente a una gestión mucho más compleja que el distrito de Tigre. Aquellos dichos sirvieron de crítica interna desde algunos sectores massistas (como la familia Galmarini) y un despegue de Mónica López que hasta el año pasado se mostraba cerca de Posse.
Pero Posse no se quedó quieto, insistió con su hipótesis y llamó a una gran interna opositora. Por lo pronto tiene dos diputados provinciales que ya dejaron sus bloques (Walter Carusso el Frente Renovador y Fernando Pérez la UCR) para armar la bancada “Espacio Abierto”, el nombre de la estructura partidaria que presenta Posse en cada elección distrital en San Isidro. Hoy, en los primeros días de febrero Mónica López empieza a retomar dialogo con el sector possista y alerta al propio Frente Renovador.
“Las cosas podrían estar mejor @SergioMassa” fue la advertencia que Mónica López le hizo al diputado nacional y líder del Frente Renovador este martes a través de su cuenta de twitter. Antes, su esposo, el diputado nacional y Secretario General de la Federación Argentina Sindical del Petróleo, Gas y Biocombustibles, Alberto Roberti, lanzó una catarata de twitts en la misma sintonía.
“Es dificil competir pero muy perverso es hacerlo contra candidatos nuevos todas las semanas” se quejó Roberti y aunque advirtió que “igualmente pienso que Sergio es el mejor candidato a presidente pese a las circunstancias que él mismo genera”. Una clara alusión a la danza de nombres que no se terminan de cerrar públicamente en el FR.
Los propios legisladores del nuevo bloque Espacio Abierto, advirtieron que esperan la llegada de más diputados. La incomodidad actual de López y Roberti con algunos nombres que integran el Frente Renovador, podrían empujarlos a ir detrás de Posse. Sin embargo, desde el FR mismo no descartan la “amenaza” de fuga no sea más que un reclamo de contención hacia el propio Massa o para alguno de los jefes políticos del FR en la Provincia.
Atrás quedó aquella “encuesta” de los primeros días del año en la que Mónica López, se ubicaba primera en la interna del Frente Renovador con diez puntos de ventaja. Se trató de un comunicado en donde no se especificó ni quién hizo la encuesta, ni sobre cuántos casos, ni en qué lugares se consultó, ni el método utilizado para su confección.
