En su intento por contener a todas las vertientes del Frente para la Victoria, el peronismo y la cultura popular, Daniel Scioli reunió a un ecléctico elenco en la cena del denominado Círculo Celeste y Blanco el jueves por la noche en Costa Salguero.
Gobernadores del Partido Justicialista, representantes de La Cámpora, intendentes, empresarios, dirigentes de organizaciones sociales, deportistas, artistas de diversa clase y talento, un sinfín de figuras desfilaron por la icónica alfombra naranja que llevaba al interior del salón donde se llevó a cabo la cena de recaudación de fondos de Scioli y su compañero de fórmula, Carlos Zannini.
Artistas como Arturo Bonín y Susana Cart, Andrea del Boca, Jean Pierre Noher, Víctor Laplace y Alejandro Awada -cuñado de Mauricio Macri –, la siempre refinada Teté Coustarot, el excéntrico Johnny Allon, el abogado mediático Fernando Burlando y el ex agente de la SIDE y siempre polémico Guillermo Cherashny compartieron el salón para darle su apoyo a su candidato.
La música fue tan ecléctica como la concurrencia. El chill out que sonó por momentos se combinó con el tema de campaña compuesto por Ricardo Montaner, y Pimpinela sucedió a la versión de La Maza interpretada por Mercedes Sosa y Shakira. En el salón escuchaba un músico de peso: Charly Alberti, ex baterista de Soda Stereo.
La mesa de los sindicalistas reunió al jefe de la CGT oficialista, Antonio Caló, el ex moyanista Omar Viviani, el diputado Omar Plani y el presidente del PJ de la Ciudad, Víctor Santa María. Los dirigentes sociales también se sentaron juntos: el diputado Gastón Harispe, el líder el Movimiento Evita, Emilio Pérsico; Luis D´Elía y Milagro Sala compartieron mesa y se fueron ni bien terminó de hablar Scioli.
Los ministros del gabinete sciolista tuvieron, obviamente, asistencia perfecta. No ocurrió lo mismo con los nacionales. El titular de Economía, Axel Kicillof; el secretario general de la Presidencia, Eduardo “Wado” de Pedro (representantes de la plana mayor de La Cámpora); el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández; el titular de la Afsca y candidato a vicegobernador, Martín Sabbatella; el ministro de Ciencia, Lino Barañao; la ministra de Seguridad, Cecilia Rodríguez, y el secretario Sergio Berni fueron los miembros del staff de la Rosada que pasaron a dar su apoyo a Scioli.
En la mesa principal se sentaron, junto a Scioli y Zannini, gobernadores peronistas vigentes y recientemente electos, como la fueguina Rosana Bertone y el tucumano Juan Manzur. También desfilaron por allí para saludar a Scioli los diputados Carlos Heller y Juan Carlos Junio.
“Así va a ser el gobierno de Daniel: va a tratar de contener a todos. Va a gobernar con el peronismo, con el Frente para la Victoria, los organismos de derechos humanos, La Cámpora. Y los va a ir llevando a su estilo, como hizo con todos en la provincia, como hizo con Mariotto”, dice un ministro del gabinete nacional que no estuvo en Costa Salguero pero mira con simpatía la candidatura del mandatario bonaerense.
Leales de siempre, antes enemigos y críticos acérrimos, sciolistas de la primera hora, advenedizos, simpatizantes o todavía desconfiados. Con impronta progresista o con reminiscencias menemistas. Scioli dio en Costa Salguero una fiel muestra de su estilo de conducción en la diversidad.