En la facultad de Humanidades de la UNLP, el dirigente del Frente de Izquierda brindó un pantallazo de los últimos episodios que tuvieron como protagonistas a grupos organizados de trabajadores que encabezaron reclamos en el sector ferroviario, en el docente, en la salud y el último en la empresa autopartista Gestamp. “En todos, el Gobierno nos tiró a la gente en contra”, definió, explicando que la estrategia del kirchnerismo fue, a su entender, enfrentarlos con el resto de la sociedad.
“La campaña que hizo el gobierno contra nosotros fue terrible. Yo iba a la calle y la gente me puteaba. La gente me decía ´yo llegué tarde al trabajo por vos que ganás 20 lucas, hijo de puta´”, comentó quien para ponerle fin a esa polémica mostró su recibo de sueldo frente a las cámaras, en el programa de Eduardo Feinmann por C5N, en pleno enfrentamiento con el ministro del Interior y Transporte Florencio Randazzo.
“Este año va a haber mucho conflicto, mucha lucha, mucho enfrentamiento político y con la burocracia”, advirtió en la charla. “Tenemos que prepararnos para eso, por más que los K atomicen al movimiento obrero y compren a las Madres de Plaza de Mayo, por ejemplo”, describió, remarcando más de una vez que “esto está a punto de explotar”.
Así, elogió a todo el Frente de Izquierda y se respaldó en ellos, remarcando que detrás de toda esta lucha que encabezan los trabajadores hay algo muy importante, y es precisamente ese respaldo político. Tras el resultado de la última elección, en el Congreso hay tres diputados de izquierda y en otras provincias también hay representantes, tanto del PO, el PTS y la Izquierda Socialista.
La anécdota de color con la que el Pollo graficó lo que gran parte de la oposición define como un “fin de ciclo del kirchnerismo” fue su charla con el periodista afín al Gobierno nacional, Diego Brancatelli.
“En una charla que tuve con Brancatelli -en donde charlábamos sobre el futuro- yo le decía ´aprovechá que esto se acaba pronto, apurate porque estos se van y se te acaba el negocio´; y el tipo se reía y me decía ´ya lo sé, pero quedate tranquilo que con el Mundial y dos o tres cosas más estoy salvado´”, comentó, remarcando que “el tipo sabe que se termina un proceso que tiene que ver con lo que él defiende. Él sabe que esto se corta muy rápido”.
“O sea que reconocen que en cualquier momento tienen que pegar el salto. Van a ver cómo las ratas empiezan a ahuyentarse ahora”, cerró Sobrero.