Los cursos son obligatorios por requerimiento de los Jueces Provinciales de Faltas para todos los infractores cuyo nivel de alcohol en sangre fue superior al límite legal mientras conducían como acciones accesorias al pago de la multa sentenciada.
“La prevención y la concientización son fundamentales en la políticas de seguridad vial, sobre todo aquellas acciones que llamen a la reflexión a los infractores, a aquel que condujo después de consumir alcohol y enfrentarlo a las potenciales consecuencias de sus actos”, explicó el Subsecretario de Coordinación Gubernamental, Emiliano Baloira.
El programa contempla una serie de charlas y muestras de videos para crear una reflexión profunda de aquellas personas que han infringido la ley por exceso de alcohol en sangre mientras manejaba.
Baloira sostuvo que “el daño que puede causar una persona que maneja alcoholizado, es enorme y no hay resarcimiento económico ni fallo de la justicia que pueda devolver la vida que se arrebata”.
En los cursos se brinda información concreta sobre los efectos de la alcoholemia, la influencia que el alcohol tiene al volante y es una herramienta para detectar posibles adicciones en forma temprana.
En la provincia de Buenos Aries, la ley establece que conductores de transporte público no pueden tener ningún nivel de alcohol en sangre, (0%) y los conductores de autos particulares, hasta 0,5%.