La compañía francesa aplica la directiva de la Agencia de Seguridad Aérea (AESA), publicada el 9 de diciembre pasado, en la que autoriza el uso de estos aparatos móviles en “modo avión”.
Los pasajeros podrán “seguir trabajando o divertirse desde el momento en que suban al avión y hasta que lleguen a su destino, en total libertad”, djo Air France en un comunicado.
En cambio, la utilización de aparatos y accesorios personales como Bluetooth y WIFI no están permitidos. Esto supone que no podrán enviar ni recibir correos electrónicos ni telefonear.
La alemana Lufthansa también anunció que aplicará la directiva de la AESA al conjunto de los pasajeros a partir de marzo. La compañía ya ofrecía en los Boeing 747-8 la posibilidad de utilizar aparatos electrónicos en “modo avión” durante toda la duración del vuelo.