En el marco de la jornada “Doce horas por justicia”, el encuentro se inició con una bendición del sacerdote Diego Fares, quien aseguró: “Luchemos por la justicia, porque si no, perdemos nuestra dignidad y se deshace el tejido social que nos une como ciudadanos, como hermanos, como argentinos”. Le siguió la lectura del poema “Me gusta la gente”, de Mario Benedetti
Por su parte, los familiares se unieron en un único pedido de justicia y anunciaron una movilización a Plaza de Mayo para mañana.
María Luján, madre de Lucas Menghini Rey, una de las víctimas del trágico suceso, aseguró: “Me emociona ver la cantidad de gente que desde muy temprano nos está acompañando. A las 8:32, como todos los 22, estuvimos haciendo el minuto de silencio acompañados por la sirena y era muchísima la gente que estaba”.
Campanella se sumó al reclamo
En el hall de la estación ferroviaria, también se instaló una muestra fotográfica de la agrupación “Fotógrafos con causa” y se colgaron desde el techo en forma de guirnaldas gran cantidad de papeles con imágenes de una vaca en cuya frente se lee la frase “No somos animales. Justicia”.
En el cierre de la jornada habló el director de cine Juan José Campanella. “No somos nosotros los que tenemos que impartir justicia, pero sí podemos juntarnos para no olvidar y darnos un abrazo”, comenzó, visiblemente emocionado. En ese punto se quebró.
“Esto fue una masacre, que es un crimen por la negligencia y la corrupción. No está mal indignarse cuando nos dijeron que esto ocurrió porque hay plena ocupación”, continuó. Y terminó: “Ese 22 de febrero Argentina se achicó. Se murió un pedazo nuestro”.
El acto terminó con la lectura de un documento, que concluye: “Se burlaron de los usuarios y los llevaron a la tragedia. Cinco ex funcionarios no escucharon las denuncias. No vamos a parar hasta que se los condene”.