Sonriente, aunque un poco dormido, Sergio Massa llegó a La Plata para recorrer una fábrica de plásticos junto a los candidatos de la 8ª sección electoral de la lista que encabezan Jorge Sarghini y Juan José Amondarain, su armador territorial, además del primer candidato a concejal, José Ramón Arteaga. También, con banderas, lo esperaban trabajadores de la Unión de Obreros y Empleados Plásticos de la Provincia.
“Estamos conscientes de que somos los únicos en condiciones de pelear la elección pero tendremos en frente al aparato político más poderosos que se conozca en términos electorales. Tenemos la tranquilidad de saber que la gente nos acompaña por haber elegido una campaña que nos permita hablar poco y escuchar mucho, algo que nos permite interpretar los reclamos además de conocer las necesidades de la gente”, admitió el primer candidato a diputado nacional por el Frente Renovador, en las puertas de la empresa productora de Plástico, a las afueras de la capital bonaerense.
“Esperemos que esta campaña pase de ser una de desacreditaciones a una propuestas concretas. Nadie que esté hablándole a la gente después de plantear la suba del mínimo no imponible, para bajar el peso que tiene el impuesto a las ganancias sobre el salario de los trabajadores y jubilados, ha elegido pararse y hablar sobre el tema. Seguro, cuando expliquemos nuestra propuesta sobre Seguridad, algunos saldrán a expresar ideas sobre eso”, reflexionó el jefe comunal, hoy bien lejos del núcleo kirchnerista que alguna vez lo supo ver en sus filas.
En relación al posible debate con el resto de los principales postulantes, esa disputa dialéctica que pregonó Francisco De Narváez a principio de semana en un hotel ubicado a metros de la Casa de Gobierno bonaerense, Massa, con el estilo de siempre, recordó que también se candidatean “(Néstor) Pitrola, (Marta) Maffei; (Eduardo) Amadeo; (Gerónimo) Venegas; (Margarita) Stolbizer; (Francisco) De Narváez y (Martín) Insaurralde, por eso hay que tratar de encontrar un marco de acuerdo con todos, sino antes de octubre, que es el momento cuando la gente elige”.
Antes de ingresar a una de las plantas, el Intendente de Tigre se refirió al llavero que confeccionó el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, quien fue blanco de críticas del sindicalista Héctor Daer, hoy dentro de sus filas.
“Me gustó el ingenio con el que (Héctor) Daer respondió. Me pareció inteligente, nosotros no vamos a contestar agravios ni faltas de respeto porque elegimos el vínculo con los trabajadores, los desocupados, la clase media y los empresarios”, indicó el hombre de Tigre, que, en el mismo concepto, se refirió a las palabras de Carlos Kunkel, quien dijo que es un “candidato armado” por los medios neoliberales. “Habría que mirar el archivo y observar a los mismos que hoy me pegan qué decían antes de que planteara una candidatura, todos venían a buscarme para que sea candidato, pero como decidí ir solo, me critican”, planteó.
“Hay muchos discutiendo el pasado, sobre una Argentina dividida pero sólo hay un sector político que plantea unir al país para construir el futuro. Me preocupa que la clase media se sienta representada, las polémicas vulgares de la política”, admitió la cabeza del nuevo espacio bonaerense, quien se describió como importante “el reconocimiento de más de 25 puntos de inflación porque las personas sienten que la inflación les está comiendo el salario”. Así terminó de hablar con los medios, para luego sacarse fotos con las personas que lo esperaban en el estacionamiento de uno de los predios que visitó.