Sucede que la figura del ex gobernador es la tercera alternativa que tiene el tigrense de cara a las elecciones de octubre. La primera será dejar jugar a algunos de sus hombres (tiene un aceitado armado con intendentes bonaerenses, un puñado de diputados provinciales que dicen representarlo y un par de senadores provinciales que dentro de la banca del FpV juegan para el jefe comunal), la segunda y más arriesgada es ser protagonista principal con el Frente Renovador, y la tercera es Felipe Solá.
Solá ya dio señales. Ayer le dijo a Radio del Plata que será candidato. Es el segundo lanzado oficialmente, Francisco De Narváez había hecho lo propio. Solá explicó que está encuadrado en el peronismo opositor “que no quiere tener un discurso en el que se diga la república se acaba”, lo cual suena congruente con la definición política que dejó ver en escasas oportunidades Massa.
Fue el año pasado cuando Solá aceleró su acercamiento al intendente de Tigre. Llegó al concejo deliberante a fines del 2012 para participar de una jornada de voto electrónico impulsada por Massa; allí se lo vio también el gobernador salteño Juan Manuel Urtubey. En el verano Felipe se encargó de alzar a viva voz la gestión del intendente del Conurbano.
Desde el armado massista no ven con malos ojos al ex gobernador, aunque ponen el ojo en la baja capacidad de cosechar aquella buena imagen con la que Solá “se retiró” del oficialismo. En aquellos tiempos, lejos del kirchnerismo, Solá se acercó a De Nárvaez y a Macri pero luego se dio cuenta que estaba equivocado. Hoy el massismo sin Massa, no superaría los 8 puntos y eso sería un fracaso ante tanta especulación sobre la figura del intendente de Tigre.
Según los más cercanos al ex gobernador, fue a partir del 27 de octubre del 2010 cuando el antiguo mandatario bonaerense se dio cuenta de su error por el lugar en el que estaba. Al ver el despliegue y acompañamiento popular que tuvo el fallecimiento de Néstor Kirchner, Solá decidió dejar aquel peronismo que había ido contra Kirchner en las legislativas del 2009 quedando de esta manera “a la deriva”.
Ahora, a la hora de renovar su banca, Solá va con su propio partido, “Partido Mejor”, a las elecciones sin cerrar las puertas para lo que pueda deparar el futuro. “Lo primero es ‘yo quiero ser’. Así es la política, se camina y después se hacen las alianzas, por supuesto es que mi intención es hacer alianza” le contestó ayer a Macerlo Slotogwiazda.
Por eso, mientras Massa aún no se define, Solá funciona como conducto aliviador, como tercera alternativa y con chances de sellar el acuerdo con el Frente Renovador +A.