“Este un tiempo electoral donde se echa a manos infinidad de recursos con la idea de descalificar. Tenemos que aportar la experiencia de 30 años de democracia, y no descalificaciones grosera e interpretaciones libres. El clima electoral alienta a interpretaciones traídas de los pelos”, reconoció Gabriel Mariotto, quien fue consultado sobre el papel que lleva a delante Amado Boudou como presidente ante la ausencia de Cristina Fernández de Kirchner.
“Si yo ocupo el rol del Gobernador, lo hago con un perfil absolutamente bajo. No ando pidiendo café y llamando los ministros. Si Amado (Boudou) hiciera otra cosa, también sería criticado, como somos criticados todos por lo que hacemos”, planteó el ex titular de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA), quien no dejó de defender al funcionario nacional. “No tenemos más remedios que estar bajo la lupa y sobre una consideración dura. Si Amado se mostrara distinto, diríamos una cosa y si lo hace humilde, otra. La sociedad entiende que este proyecto tiene una línea, pero en el camino del neoliberalismo, no”.
Sobre el papel de Daniel Scioli como “heredero” del kirchnerismo, reconoció que “la elección es una coyuntura y el heredero de este tiempo surgirá sobre los cierres de listas del 2015, como se organice el espacio que lidera la Presidenta”. Pero, a pesar de que en el pasado fue el principal crítico de su gestión, se refirió a las posibilidades de que el ex vicepresidente de Néstor Kirchner sea el candidato K en 2015.
“Es un dirigente importantísimo, con proyección, pero eso es anticipar mucho los tiempos hablar de herederos es como un desafío al destino, me gusta ir paso a paso como Mostaza Merlo”, dijo Mariotto, en declaraciones a radio La Red.
Por último, y ante la consulta de si se veía en un tiempo discutiendo en la misma mesa con Sergio Massa, disparó un rotundo “no”.