“Sin inclusión laboral no hay inclusión social, por eso creemos que es fundamental extender esta posibilidad que brinda el gobierno nacional a más personas ya que, como establece el sistema, estos emprendedores son reconocidos como contribuyentes y por lo tanto pueden emitir facturas, ser proveedores del Estado y acceder a una obra social y al sistema jubilatorio”, explicó el Ministro.
Ferré indicó que desde la Subsecretaría de Políticas Socieconómicas –que conduce Ariel Notta– “trabajaremos este tema con el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, la cartera de Trabajo de la Provincia y los municipios” y resumió: “es parte de la articulación que nos pide a diario el gobernador Scioli para poner a disposición de las familias todos los instrumentos que necesiten para mejorar su calidad de vida”.
Tanto la Ley Alas (Actividades Laborales de Autoempleo y Subsistencia) –en la Provincia hay unos 17 mil inscriptos– como el Monotributo Social, son dos instrumentos fundamentales para ayudar a que las personas en situación de vulnerabilidad puedan incorporarse a la economía formal.
Los destinatarios son personas físicas (una sola persona), integrantes de proyectos productivos y asociados a cooperativas de trabajo; beneficiarios o no de planes sociales; y quienes estén realizando una actividad económica de producción, servicios o comercialización, que contribuya al desarrollo local y la economía social.