Ambos continúan internados, pero Etchecopar sería dado de alta el miércoles, no sin antes encontrarse con una amenaza a través de una carta anónima con la imagen de “San La Muerte”, enviada al cuarto del Hospital Central de San Isidro donde se encuentra internado tras haber sido baleado.
“Gil, ortiba, mataste a mi compañero. Así va a morir tu hijo y tu puta cría. No reconozcas a nadie. Rescatate”, dice el texto manuscrito en una hoja que lleva una foto y una oración del santo.
De inmediato, la red de los 140 caracteres volvió a utilizar la ironía como expresión de repudio, posicionando “San La Muerte” cono uno de los tópicos tendencia del país. La mayoría de los tweets de los usuarios están dirigidos al tema, su protagonista poco querido, la carta y el santo.
San la Muerte es un santo de origen guaraní no reconocido oficialmente por la iglesia católica. Para muchos es la misma muerte, la parca romana, y para otros simplemente es una entidad con una gran fuerza espiritual. Se lo invoca igual que a otro santo, con la diferencia que a éste sus fieles también le pueden llegar a pedir que realice algún daño a alguien.