“Protolitio”, fue desarrollado por la Comisión de Investigaciones Científicas (CIC) dependiente del Ministerio de la Producción, Ciencia y Tecnología bonaerense, la Universidad Nacional de La Plata, el Instituto de Investigaciones Físico-Químicas, Teóricas y Aplicada (INIFTA) del CONICET y el Grupo de Ensayos Mecánicos Aplicado (GEMA).
El miércoles por la mañana, el docente e investigador de la Facultad de Ingeniería de la UNLP Guillermo Garaventta, partió a bordo del “Protolitio” desde el Cruce de Etcheverry en La Plata, hacia Mar del Plata.
Garaventta explicó que “la principal ventaja de este tipo de vehículos es que funcionan con energías completamente limpias, que no contaminan el medioambiente, como sí ocurre con los combustibles fósiles”, y aclaró que además, las baterías de litio “duran cinco veces más que las de plomo y son reciclables”
La batería se carga con un tomacorriente convencional a la red de 220 voltios y, en un plazo de 5 horas, tendría la recarga suficiente para unos 60 u 80 kilómetros, según su uso.
“El vehículo tiene un motor en cada una de las ruedas traseras y podemos comandar independientemente cada motor, lo que vamos a intentar llegar con uno, para demostrar que con el consumo de sólo media plancha se puede llegar a Mar del Plata”, explicó el docente antes de partir.
Precisó que viajará a 35 kilómetros por hora “ya que si lo aumentamos, el consumo aumenta y tenemos posibilidades de no llegar”.
“Con sólo 450 vatios, es decir 4 lámparas de 100 y una de 50, intentaremos llegar a Mar del Plata si el clima nos deja”, aclaró.
Garaventta expresó que “hay que extraer los recursos naturales de manera ecológica y el litio está a 60 metros de profundidad y se puede sacar con una cañería, sin depredar ninguna montaña”.
“Si no lo sacamos, tarde o temprano vendrán por él empresas de afuera porque es el más barato y más fácil”, remarcó.
“Nuestra primera meta es poder imponer la idea de que el litio puede transformarse en un futuro muy cercano en una alternativa energética para la Argentina”, explicó.
El viaje supondrá un costo de 5 pesos de electricidad. El triciclo eléctrico tiene dos motores de tracción en las ruedas traseras y un pack de baterías de litio (con celdas chinas) que fueron desarrolladas en los laboratorios del INIFTA y puede desarrollar una velocidad de más de 60 kilómetros y tiene una autonomía de entre 250 y más de 300 kilómetros.
Los caños de la estructura del prototipo pertenecieron a un helicóptero, el material del chasis a un avión y la batería consta de 19 pilas de litio de 5 kilowatts-hora, cuyo costo ascendió a 2.500 dólares.