Algo inédito en sus casi 14 años de gobierno, Chávez señaló al vicepresidente y canciller, Nicolás Maduro, como su eventual sucesor, aunque remarcó que la llamada Revolución Bolivariana “no depende de un solo hombre, porque es un colectivo”.
Algo inédito en sus casi 14 años de gobierno, Chávez señaló al vicepresidente y canciller, Nicolás Maduro, como su eventual sucesor, aunque remarcó que la llamada Revolución Bolivariana “no depende de un solo hombre, porque es un colectivo”.
En cadena nacional de radio y televisión, Chávez aseguró que era “absolutamente necesario” someterse a una nueva intervención por “la presencia de nuevas células malignas en la misma zona” en la que está afectado desde el año pasado.
“Con el favor de Dios saldremos victoriosos y adelante”, indicó el mandatario, que por primera vez en su discurso admitió la chance de que su administración deba seguir con otro hombre al frente.
Recomendó a sus seguidores que voten por Maduro para que lo suceda en la presidencia de la república, “de ocurrir alguna situación” que le impidiera su tarea como mandatario.
“Si se presenta una circunstancia sobrevenida, que me inhabilite para continuar al frente de la Presidencia, bien sea para terminar el mandato que quedan pocos días, y sobre todo para asumir el nuevo período para el cual fui electo por la mayoría del ustedes, si algo ocurriera que me inhabilitara, en ese escenario en que sería obligatorio convocar nuevas elecciones, mi opinión es que ustedes elijan a Nicolás Maduro como presidente”, señaló.
El jefe del palacio Miraflores reconoció que existen “riesgos innegables en esta nueva batalla”, y exhortó a los venezolanos a “seguir elevando la bandera” de la Revolución Bolivariana.
“Hemos pasado etapas; afortunadamente esta Revolución no depende de un solo hombre, se ha desatado un liderazgo colectivo”, agregó, e instó a fortalecer la unidad popular y de todas las fuerzas revolucionarias ante el hecho, que dio por seguro, de que “los adversarios no descansarán en la intriga, sobre todo, en circunstancias como éstas”.
“Uno siempre ha vivido de milagro en milagro, yo sigo aferrado a ese milagro”, expresó, y reseñó que desde junio del año pasado, apenas se le detectó el cáncer, vive la enfermedad “con mucha mística, fe, esperanza, con mucha dedicación en lo individual, en lo familiar”, e incluso “enfrentado manipulaciones, miserias humanas, pero por encima de todo con la frente en alto”.
Varias plazas de Venezuela -entre ellas la céntrica Bolívar- se colmaron hoy de seguidores y militantes del oficialismo que asistieron para respaldar a Chávez en este momento, en respuesta a una convocatoria que lanzó por la red social Twitter el ministro de Información y Comunicación, Ernesto Villegas.
Chávez fue operado en junio del año pasado en Cuba por un “absceso pélvico” y 15 días después regresó al quirófano para que se le extirpara un tumor cancerígeno en el abdomen, sobre el cual él mismo informó aunque sin mayores detalles.
Tras la operación se sometió a varias sesiones de quimioterapia, al cabo de las cuales afirmó que estaba curado. Sin embargo, en febrero pasado fue operado de lo que llamó una “recurrencia” del cáncer y luego fue tratado con radioterapia.
Tres meses después de concluir la radioterapia, Chávez asumió la dura tarea de buscar una segunda reelección con una campaña en la que limitó sus apariciones públicas, pero logró una victoria con 55 por ciento de los votos contra 44 por ciento del opositor Henrique Capriles Radonski, candidato de la Mesa de Unidad Democrática (MUD). Este nuevo periodo debe iniciarse el 10 de enero.
Capriles, quien el domingo próximo competirá en las urnas con la intención de retener la gobernación del poderoso estado Miranda, envió su “palabra de solidaridad” hacia Chávez y aseguró que no estaba “sacando cuentas” para especular con la salud del mandatario.