Los países de la UE con contratos ya firmados para la importación de crudos y derivados de Irán tendrán hasta el 1 de julio del 2012 para concluir esos acuerdos, precisaron fuentes diplomáticas citadas por las agencias DPA y Europa Press.
La UE también acordó congelar los activos del banco central iraní y prohibir todo el comercio en oro y otros metales preciosos con el organismo y otras entidades públicas, agregaron.
El acuerdo se cerró tras obtener el sí de Grecia, el último Estado miembro que mantenía reservas sobre la aplicación del veto al crudo iraní, que el país compra en condiciones muy ventajosas.
Según fuentes diplomáticas, el resto de socios dieron a Atenas “garantías políticas” de que se negociará con otros países proveedores para mantener el suministro en condiciones parecidas, dados los problemas financieros griegos.
Además, accedieron a revisar el embargo antes del próximo 1 de mayo, aunque para modificar la medida sería necesaria la unanimidad, por lo que una marcha atrás resulta prácticamente imposible.
Junto a Grecia, Italia y España serán los países más afectados por la prohibición de importar productos petroleros de Irán.
En 2010, España tuvo a Irán como su principal suministrador de petróleo, con un 14,6 % del total, un porcentaje que podría haber aumentado en 2011 como consecuencia de la guerra en Libia.
Mientras, para el conjunto de los Veintisiete, las importaciones de crudo iraní representan en torno a un 5 % del total.
Irán tiene en Europa uno de sus principales mercados, por lo que la UE confía en que la medida contribuya a aumentar la presión sobre el régimen para que acceda a negociar sobre su polémico programa nuclear.
El bloque ha decidido hoy aumentar también sus sanciones financieras a Teherán, congelando los activos del Banco Central iraní y bloqueando parcialmente las transacciones con él, dejando una excepción para permitir que “el comercio legítimo” continúe y para que la deuda iraní pendiente pueda ser pagada a los países europeos.
Entre las nuevas medidas se incluyen también restricciones a la compra de oro y metales preciosos procedentes de Irán, según fuentes diplomáticas.
En paralelo, los ministros de Exteriores han subrayado hoy que la UE sigue abierta a negociar con Teherán para aclarar los fines de su programa de desarrollo atómico ante la comunidad internacional.