James estaba acompañada por su marido, Artis Mills, y sus hijos cuando falleció debido a complicaciones de su enfermedad, a pocos días de cumplir 74 años (el 25 de enero).
La cantante había pasado Navidad al cuidado de los médicos y el 5 de enero pudo salir del hospital para estar con su familia y amigos. En ese momento, uno de sus hijos, Donto, había revelado que “seguía luchando por su vida”.
La primera aparición en la escena musical de Etta James fue en 1955, pero no fue hasta 1961 que lanzó su primer disco “At Last!”, cuyo primer sencillo del mismo nombre la llevó a la fama y el cual, con el tiempo, fue reinterpretado por cantantes contemporáneas como Beyoncé o Christina Aguilera.
A lo largo de su carrera, fue telonera de los Rolling Stones, ganó seis premios Grammy y fue votada en 1993 para formar parte del Rock and Roll Hall Of Fame.
Durante su vida, los problemas con la heroína fueron de público conocimiento y, aunque pudo sobreponerse a la adicción, sufrió de demencia y hepatitis C.
El mundo del blues y el soul pierde una estrella más y hoy está de duelo.
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