En un nuevo episodio de tensión con el macrismo, Karina Milei encuadró a La Libertad Avanza porteña para buscar eliminar las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias en la Ciudad de Buenos Aires, un movimiento que con seguridad volverá a agitar la relación de la Casa Rosada con el Jefe de Gobierno, Jorge Macri y su primo, Mauricio Macri.
"Una vez que se presente en el Congreso Nacional el proyecto de ley para eliminar las PASO, enviaremos a la Legislatura porteña el proyecto para hacerlo en Ciudad. Nuestro compromiso es replicar en cada distrito lo que hacemos a nivel nacional", anticipó una fuente cercana a la cúpula libertaria porteña.
Cuando la Casa Rosada adelantó la semana pasada el envío al Congreso del proyecto para ponerle fin al sistema de primarias, el jefe de Gobierno porteño salió al cruce de la idea. "Cambiar el sistema electoral el mismo año que se va a votar tiene ese tufillo raro de lo hago porque me conviene”, afirmó Jorge Macri, en declaraciones a radio Rivadavia.
Tensión entre el macrismo y La Libertad Avanza
El proyecto volverá a sacudir la relación entre La Libertad Avanza y el macrismo en momentos en los que comienzan a perfilarse las estrategias electorales para el año que viene. El vínculo todavía no se recuperó de otro movimiento disruptivo de los libertarios, que hace menos de un mes, presentaron en la Legislatura una Ley de Bases para aplicar un ajuste sobre la estructura del Estado de la Ciudad y que provocó el mayor pico de tensión entre ambos espacios políticos desde que Milei llegó al poder.
La encargada de presentar ese proyecto fue Pilar Ramírez, una persona de extrema confianza de la secretaria general de la Presidencia, que encabeza el bloque parlamentario y la filial libertaria porteña. Probablemente sea quien presente la reforma electoral que incomodará al PRO.
La bala de plata de los Macri
Desde la derrota interna y la posterior ruptura de Horacio Rodríguez Larreta con el PRO y el pase de Patricia Bullrich a Las Fuerzas del Cielo, la cantera porteña del macrismo entró en crisis. La posibilidad de que se le ponga fin a la competencia interna, el método privilegiado que le permitió a la tropa del expresidente alzarse con mayorías en diferentes distritos, le agrega dramatismo al escenario y enfrenta a su partido a importantes dilemas. El pasillo de una eventual alianza entre las expresiones de derecha parece estrecharse a luz de los últimos movimientos y de mediciones que envalentona una jugada pura de los libertarios porteños.
Sin sus principales referentes jugando en el distrito, el macrismo no cuenta con figuras destacadas o que asomen con proyección más allá de la Legislatura, un escenario que amenaza con repetir la pesadilla de las elecciones nacionales del año pasado cuando quedaron en tercer lugar debajo de LLA y del peronismo.
La situación, tiene un agravante adicional: en el round 2025, además, en la Ciudad se juegan tres bancas del Senado de la Nación. Esto podría obligar a Mauricio Macri a usar la última bala de plata: ser él mismo quien encabece la boleta nacional y defender en persona el histórico bastión amarillo.