Karina Milei y Martín Menem ungieron al diputado Gabriel Bornoroni como líder de La Libertad Avanza local. La queja de los socios. El fin de la anarquía.
Gabriel Bornoroni, Karina Milei y Martín Menem.
Martín Menem, Karina Milei y Gabriel Bornoroni.
La interna libertaria derrama en centro del país y, por lo menos hasta ahora, Gabriel Bornoroni va ganando espacio y llenando los casilleros que a Javier Milei le faltan para completar la estructura mediterránea. Con el apoyo de Martín Menem y Karina Milei, este miércoles, quedó a un paso de tomar el control del partido en Córdoba.
Menem y Karina llegaron a la provincia poco antes de las 15 con la decisión de ordenar la interna libertaria y ascender a Bornoroni a la virtual conducción del espacio que, más temprano que tarde, quedará oficializado como partido y ya no como una coalición. La mira está puesta el armado que deberá redundar con más bancas en el Congreso en 2025.
La puja judicial por la conformación de La Libertad Avanza también tiene como protagonistas a Abelardo Losano y a Celeste Ponce, que como Bornoroni iniciaron expedientes para obtener la personaría correspondiente.
La Rioja es el único distrito en el que LLA está oficializado como fuerza independiente, razón que explica el viaje de Menem, que junto a su primo “Lule” gana peso en el armado nacional.
Las partes en pugna entienden que carence de peso legal, aunque reconocen como parte de una “presión” que se profundiza con la llegada de la secretaria general de la Presidencia.
Se trata de un paso que marca el fin de la etapa anárquica de LLA y el ingreso oficial al mundo de la política y el ordenamiento vertical que se practica nacionalmente, pese al pataleo de algunos y los giros discursivos de otros.
Distanciado desde hace tiempo del diputado, Rodolfo Eiben cuestionó que Bornoroni haya pedido “la reserva” del nombre del partido sin darle participación al Partido Demócrata que “siempre ha sido el sustento de la candidatura de Javier Milei”.
En una entrevista con Radio Nacional, de hecho, Eiben aseguró que Bornoroni “llegó a diputado de la mano del Partido Demócrata de Córdoba".
“No hemos vuelto a tener diálogo, pero tiene que demostrar que tiene el perfil para conducir un partido”, aseguró reconociéndose “sorprendido” por la movida que tuvo como escenario a los Tribunales Federales de Córdoba.
Como contó Letra P, el empresario estacionero viene sumando puntos para convertirse definitivamente en la cara de la escuadra violeta en el territorio el que Milei cosechó su victoria más contundente.
Un conocido suyo con apellido ilustre fue confirmado al frente de la delegación cordobesa de ANSeS esta semana. Se trata de Andrés Bauzá, hijo del primer jefe de Gabinete de Carlos Menem y socio del diputado libertario. La otra gran caja en el centro del país, el PAMI, será manejada por otro socio suyo, Marcos Patiño Brizuela.
Los tres comparten estudio en pleno centro cordobés y, aunque en las filas libertarias nieguen que las designaciones tienen que ver con la militancia, tuvieron una activa participación en la campaña. De hecho, Patiño Brizuela fue apoderado de LLA en la última etapa electoral.
La definición ahora estará en manos de la Justicia, que deberá dictaminar respecto al conflicto. “Se lo van a dar a Bornoroni, la presión es mucha”, advierten desde uno de los sectores convocados en la audiencia.
La discusión técnica analiza tiempos y legitimidad en la presentación de los avales necesarios para la conformación del partido.
En Córdoba, el conflicto por el sello oficial libertario existe desde hace tiempo y quedó expuesto en las distintas instancias electorales del 2023. En la elección provincial, compitieron dos listas referenciadas con Milei.
El referente del Partido Libertario, Agustín Spaccesi, se quedó con la denominación con la que alcanzó una banca en la Legislatura, mientras que el Partido Demócrata y el Movimiento de Integración y Desarrollo (MID) formaron el Frente Liberal Demócrata Desarrollista, que tuvo como candidato a vicegobernador a Bornoroni, entonces un outsider que participaba por primera vez de una elección.
Con Spaccesi cuestionando el armado, todos los sectores que conformaban el frente liberal -que no alcanzó el 1% de los votos en la elección provincial- fueron los que llenaron la nómina de candidatos con las que Milei ganó tres elecciones en el centro del país.
Eiben fue elegido para ocupar una banca en el Parlasur, mientras Bornoroni y la titular del MID, Cecilia Ibañez, llegaron a Cámara Baja secundando a Ponce, la seguidora del Presidente que fundó la agrupación Pumas Libertarios, sumándose al círculo de mujeres que protagonizaron la campaña libertaria.
La disputa por la representación oficial libertaria en el centro del país trasciende las rencillas locales y se inscribe en la interna a cielo abierto que marca el día a día de la estructura nacional que acompaña a Milei.
Reconvertido en uno de los hombres más cercanos a la mesa chica del Presidente, Bornoroni reconoce como sus únicas terminales políticas al líder libertario y a su hermana Karina. Ocupando la presidencia de una comisión clave en Diputados, la de Legislación General, también logró línea directa con los Menem y supo construir una vínculo estrecho con José Luis Espert, el nuevo mejor amigo del mandatario.
El protagonismo de la reciente incorporación del elenco oficialista y las versiones que hablan de sus intenciones de quedarse con la presidencia del bloque pone en pie de guerra a Oscar Zago, presidente del MID a nivel nacional, y consecuentemente a Ibáñez, su referencia cordobesa.
Profundizando en la arena de la interna, el pataleo de Eiben también puede generar réplicas en uno de los terremotos políticos que mayor preocupación genera en el pasilleo oficialista: Victoria Villaruel es la presidenta del Partido Demócrata en la Provincia de Buenos Aires.