La medición de los precios de febrero que el Indec había arrojado a mediados de marzo fue apenas una alarma de lo que se avecinaba. Con la guerra desatada en Ucrania, el ministro de Economía, Martín Guzmán, no esperó a ver resultados de la política de control de precios y se apresuró a adelantar un piso del 6% para evitar que el choque desestabilice la gestión y le otorgue tiempo para restablecer variables macroeconómicas en línea con el plan acordado con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Como contó LetraP, en su cartera firmaban de antemano esa cifra, con los ojos cerrados, ya abriendo el paraguas.
La estrategia comunicacional, anunciada anteriormente al presidente Alberto Fernández, funcionó al menos para ganar algunos días más. El conflicto mediático entre Guzmán y el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, quedó circunscripto en los disparos internos del Gobierno que en la guerra contra la inflación que el jefe de Estado había anunciado apenas se conoció el índice de febrero.
El adelanto de las expectativas buscó morigerar el impacto real del 6,7% que el Indec anunció en la tarde del miércoles. Al mismo tiempo, le permitió a Guzmán ponerse al frente de las decisiones económicas que puedan tener efecto para los precios de abril, según confiaron a Letra P desde su entorno. El sector empresarial pidió, como primera medida, desalentar las tensiones internas dentro del gobierno nacional para bajar el clima bélico nacional.
Un ejecutivo de una de las empresas más poderosas del sector alimenticio planteó que el sector privado está a la espera de un ajuste fiscal para "evitar que la emisión monetaria sostenga el ritmo inflacionario". "No hay ninguna herramienta que te permita sostener el valor de la moneda local, que está totalmente devaluada. Hoy la mejor inversión es atada a la inflación", se sinceró ante Letra P.
Una de las herramientas que podría alentar las inversiones en pesos, y que cuenta con el aval del mercado, es la suba de la tasa de interés por parte del Banco Central (BCRA) que conduce Miguel Ángel Pesce. Por el feriado, la entidad monetaria adelantó 24 horas sus habituales reuniones de los jueves para definir una suba pedida por Guzmán, en línea con el acuerdo con el FMI, y resistida por industriales ante el encarecimiento del financiamiento.
De todos modos, el mundo empresario "prefiere" una normalización de las condiciones macroeconómicas antes que los sobresaltos inflacionarios y la falta de dólares para poder importar insumos, le dijo a Letra P la misma fuente. Es por eso que desde la Unión Industrial Argentina (UIA) que conduce Daniel Funes de Rioja, la única representación empresaria sentada en la mesa de diálogo tripartito, respaldan la estrategia Guzmán.
Fuentes de la secretaría de Comercio Interior consultadas por este medio ponderaron el resultado de las políticas de canastas que implementó Feletti en la denominada guerra contra la inflación. "Vemos que a pesar de la guerra entre Rusia y Ucrania y el fuerte impacto que la misma tuvo en el precio internacional de los alimentos, el ítem 'Alimentos y bebidas no alcohólicas' del IPC se desaceleró, ya que había sido 7,5% en febrero y fue 7,2% en marzo", destacaron.
En el entorno de Feletti festejaron, al menos, que en el conurbano bonaerense "la desaceleración es mayor, ya que el aumento en el rubro “Alimentos y bebidas no alcohólicas” había sido de 8,6% en febrero y fue 6,1% en marzo". Ese índice pesa mucho más si se tiene en cuenta que, en febrero, el Gran Buenos Aires (GBA) "había sido la zona del país con el mayor incremento en alimentos, mientras que en marzo es la zona que presentó el menor aumento".
"Lo del GBA es destacable, ya que se trata del área con mayor densidad demográfica del país y es una zona fundamental a incidir cuando se diseña una política pública, sobre todo una relativa a garantizar el acceso a bienes de consumo masivo", destacaron desde Comercio Interior.
La tarea de Guzmán es desafiante. Primero, alinear a los funcionarios que deberían responder al plan económico. Feletti le prometió "seguir trabajando con los programas existentes (+Precios Cuidados y Cortes Cuidados) y afianzar los de reciente lanzamiento (canasta de frutas y verduras y Precios Cuidados para comercios de proximidad), sumado a la implementación del Fondo Estabilizador del Trigo, ya que los derivados de este cereal han sido fuertemente impactados por los efectos de la guerra".
Según el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), el fideicomiso del trigo para contener el precio del pan y los panificados recién tendrá impacto "en el índice de abril".