Fueron varias fechas sintetizadas en un mes las inspiradoras de la denominación del espacio. Desde el día del trabajador, pasando por el natalicio de Evita y la histórica marcha blanca docente del 88, hasta los múltiples significados del 25 (tanto el primer gobierno patrio, como las asunciones de Cámpora y Néstor Kirchner). El Movimiento Mayo reúne todos esos hitos como rasgos identitarios de su perfil de construcción, aunque el detonante de su puesta en marcha fue uno en particular: militar activamente por la reelección de Cristina Fernández de Kirchner en 2011. “Era necesario defender un gobierno nacional y popular”, coinciden algunas de las voces consultadas al recordar los inicios.
Con su núcleo en la línea celeste que conduce el Sindicato Único de Trabajadores de la Educación de la provincia de Buenos Aires (Suteba), entre los pioneros de esta agrupación figuran el titular de la CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky, la actual senadora bonaerense María Reigada, el líder del Suteba, Roberto Baradel, y la fallecida exsecretaria General de la Ctera Stella Maldonado, entre otros.
Al cumplir una década, este espacio celebró con la participación del presidente Alberto Fernández y el gobernador Axel Kicillof, lo que da cuenta del rol activo dentro de la alianza gobernante: “Somos una organización que tiene debate dentro del Frente de Todos”, sostienen al tiempo que ponderan su avance territorial, acentuando desembarcos en diversos distritos bonaerenses.
Meses atrás, Mayo se lanzó en varios puntos del interior, mientras que en el conurbano días atrás se puso en marcha en Ituzaingó. Cada lanzamiento suele estar acompañado de actividades virtuales con presencia de Yasky, Baradel y las principales referentes provinciales, como Reigada y la directora de Cooperación escolar bonaerense, Rosana Merlos.
Pero, además de su jurisdicción originaria, en estos últimos tiempos también se fue marcando presencia en más de una decena de provincias, como Santa Fe (vía la titular de Ctera Sonia Alesso), CABA, Mendoza, Formosa, Rio Negro, Chaco, Córdoba, La Pampa, Neuquén, Entre Ríos, entre otras.
Ya con presencia en varios concejos deliberantes y consejos escolares en Buenos Aires, en el Movimiento Mayo buscan ganar musculatura este año en términos de bancas distritales, pero además apuntan a sumar lugares en gabinetes distritales en aquellos municipios afines del Frente de Todos. En los estratos superiores, este año vence la banca del referente del espacio, Hugo Yasky, por lo que diversas fuentes consultadas confirmaron que la intención es que el líder de la CTA juegue por la reelección.
Más allá de esa certeza, también existe la pretensión de que otro miembro de esta agrupación acompañe a Yasky dentro de la lista del FdT para la Cámara baja nacional. Claro está, uno de los nombres que más suena es el de Baradel: “Lo queremos a Roby en algún lugar de definición política”, enfatiza una voz de la mesa chica del Movimiento Mayo quien, de todas maneras, aclara que, al momento, no hay una definición al respecto.
Esta indefinición no solo la argumentan en que existen referentes en otras provincias por los que también podrían pujar en la mesa de negociación frentista por un lugar expectante para acceder a una banca al Congreso, sino que también se recalca la intención de no “dejar desvestidas nuestras organizaciones sindicales” por el hecho de ganar espacios legislativos. En este punto, al hacerse foco en el “compromiso con lo sindical” y el trabajo por “la unidad del movimiento obrero”, se destaca que Baradel “juega un papel muy importante” en ese lugar.
Sin estar definida la movida del líder del Suteba sobre el tablero electoral, en el espacio que lo tiene como uno de los referentes y articuladores dentro de la mesa frentista sí se asegura que en cada sección electoral hay nombres para ofrecer a la Legislatura bonaerense, o bien para los recintos deliberativos en algunos de sus bastiones.
Entre algunas de las referencias que se destacan en cada jurisdicción a la hora del armado seccional se menciona a la concejala de San Fernando María José Parejo (en la Primera), la edila de San Nicolás Bibiana Giglio (en la Segunda), la jefa de bloque del FdT en Almirante Brown, Cecilia Cecchini (en la Tercera), la titular del Suteba-Junín, Francina Sierra (en la Cuarta), el secretario General Adjunto de la CTA bonaerense, el marplatense Raúl Calamante (en la Quinta), la concejala de Laprida Karen Lestarpe (en la Sexta) y una de las referentes provinciales del espacio, la olavarriense Rosana Merlos (en la Séptima). En La Plata, integran la agrupación dirigentes como el vice del Oceba, Roberto Daoud.
Amén de esto, en el Mayo se destaca que el movimiento apunta a una construcción política que trascienda lo electoral. En ese sentido, se subraya el armado territorial que se fue gestando a lo largo de los años, sumando nutrientes de otras extracciones sindicales y de armados barriales vía CTA. En varios puntos, la fisonomía del espacio se liga a las características de cada comuna, siempre con la perspectiva de género en la agenda de debate. En bastiones de la Tercera como Florencio Varela o La Matanza, el trabajo barrial se articula con el Frente Barrial mientras que en municipios de la Primera como San Fernando y San Isidro se sumaron integrantes del gremio de judiciales.
