El gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, dejó en claro que prioriza lo que entiende como una “lucha contra las mafias” por sobre la unidad del conjunto del PJ. De esa manera, aunque sin nombrarlo, le echó más tierra al senador Armando Traferri. Rodeado de intendentes, presidentes comunales, ministros y ministras y unos pocos legisladores, el rafaelino cerró el año con su primer acto político. “Definitivamente cambió la forma de hacer política”, remarcó.
Como contó Letra P, Perotti tiene relato para desandar. El gobernador está convencido de que el camino es el que trazó el día que asumió, cuando dijo que venía a “cortar el vínculo del Estado con el delito”. El acto de este martes, en la localidad de Sauce Viejo, cerca de la capital, le permitió desarrollar esa impronta.
Más de 150 dirigentes peronistas, en su mayoría alcaldes, se reunieron para escucharlo. En un video, una suerte de intro del evento, se recordó una tapa de diario que pregonó: “Se viene el perottismo”. Ausente la vicegobernadora Alejandra Rodenas, que viajó al Congreso para seguir de cerca la votación sobre la legalización del aborto, Perotti se rodeó en el escenario de dos intendentes, una presidenta comunal y un presidente comunal.
El primero en hablar y el más elocuente fue el de Puerto San Martín, Carlos De Grandis, territorial y amigo de Traferri. No esquivó las balas y habló sobre el peronismo. En ese sentido, dijo rápido que “la pelea no está dentro de los propios compañeros”. El puertense aclaró que no representa a nadie ni que tampoco pretende reemplazar a Traferri en la Legislatura. “No nos peleemos más, tenemos que estar juntos, sino no nos va a ir bien”, alertó.
Perotti no le escapó al bulto. Primero se concentró en lo que más le gusta, hablar de producción, industria, actividad y trabajo. Les agradeció a los intendentes por “salvar vidas” durante la pandemia y en los últimos minutos de su extenso discurso se puso picante.
Criticó a “muchos periodistas” que se detienen en una interna del PJ cuando, en realidad, “Santa Fe tiene que reflexionar sobre qué le ha pasado”. “¿Por qué la dirigencia se alejó tanto de la gente?”, arrancó el gobernador.
“Es más fácil buscar la pelea en el PJ porque hay investigación por cosas que no sucedieron ahora, que sucedieron en gobiernos pasados, donde dijimos claramente que había que dejar de hacer la vista gorda”, ahondó.
Para Perotti, “no hay seguridad posible si no se enfrenta al crimen organizado, a las mafias y al narcotráfico”. Ubicó esa terna como característica de los doce años de gobierno socialista y, sin nombrar a Traferri, volvió a la carga con el eslogan. “Esto es en todo caso una discusión de corrupción o decencia, de justicia o de impunidad, no de internas. El peronismo sabe separar la paja del trigo, construir a favor de la gente. La gente no quiere impunidad ni privilegios”, sentenció.
Sobre el cierre, rememoró las “varias” ocasiones a lo largo del año en las que el bloque que lidera Traferri y el Frente Progresista le pusieron un stop a sus iniciativas. “Los frenos que se ponen no son solo porque quieren frenar a un gobierno; tuvimos varios (casos), el presupuesto, las leyes que no salían, la emergencia... Quieren frenar una forma diferente de hacer política, que transparente, que deje de lado las extorsiones, el esquema corporativo, el vínculo de la política con el delito. No hay margen con este gobierno. Definitivamente, cambió la forma de hacer política. Si se corta el vínculo con el delito, ahí sí vamos a trabajar todos juntos”, cerró.
Ausencias
El grueso de las sillas las completaron intendentes, presidentes comunales, ministros y ministras. Llamó la atención la ausencia casi total de diputados provinciales. Nadie de los y las seis integrantes del bloque oficialista dio el presente. Sí lo hizo, llamativamente, el legislador del monobloque del Frente Renovador, Oscar Cachi Martínez, quien tuvo varios cruces con el gobierno a lo largo del año.
Tres de seis y uno virtual
Del bloque “Lealtad” del Senado, el perottista, se sumaron al acto la mitad de sus miembros. Marcelo Lewandowski, Alcides Calvo y Ricardo Kaufmann (bastón en mano) estuvieron en Sauce. Marcos Castelló asistió de manera virtual y envió un video. Los flamantes integrantes del grupo, Eduardo Rosconi y Cristina Berra, pegaron el faltazo.