El Senado no logró reunir quórum este miércoles para la sesión en la que se iba a tratar el pedido de allanamiento a los domicilios de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner presentados por el juez federal Claudio Bonadio. Pese a que el presidente del interbloque Argentina Federal, Miguel Ángel Pichetto, manifestó su intención de avalar el requerimiento del magistrado, solo ocho senadores del peronismo se sentaron en el recinto y la sesión se cayó. También faltaron los legisladores de Cambiemos Esteban Bullrich y Miriam Boyadjian.
A las 14:30, horario previsto para el comienzo de la sesión, el sector que habitualmente ocupa el bloque de Pichetto estaba casi desierto. El presidente de la bancada estaba sentado junto al salteño Rodolfo Urtubey. Con algunas bancas de separación aparecían el santafesino Omar Perotti, el chaqueño Rodolfo Aguilar, el catamarqueño Dalmacio Mera, el correntino Carlos Espínola, el cordobés Carlos Caserio y el chubutense Juan Pais. El resto de los senadores del interbloque Argentina Federal había resuelto no bajar a la sesión.
En el recinto tampoco estaba ninguno de los legisladores del bloque del Frente para la Victoria, ni los puntanos Adolfo Rodríguez Saá y María Eugenia Catalfamo, los santiagueños del Frente Cívico por Santiago, el misionero Maurice Closs, el neuquino Guillermo Pereyra, ni la rionegrina Magdalena Odarda. El porteño Fernando "Pino" Solanas apareció apenas unos minutos, se levantó y se fue. A las 14.37, con 35 senadores en las bancas, la sesión se dio por caída.
Pese a que la sesión era una continuidad de la reunión de la semana pasada, que había pasado a un cuarto intermedio - y por lo tanto no requería quórum para su inicio - los jefes de los bloques consideraron que no tenía sentido comenzar el debate porque, dado que no había 37 senadores sentados en sus bancas al comienzo, tampoco los había a la hora de la votación, cuando sí se necesita quórum.
“Habíamos establecido que teníamos el quórum para iniciar como corresponde. Tengamos un poco de paciencia a ver si podemos constituirlo”, pidió el presidente del interbloque Cambiemos, Luis Naidenoff, pasadas las 14.30. Pero el radical ya casi daba por caída la sesión.
Con esa situación sobre la mesa y las bancas de su bloque vacías, Pichetto pidió la palabra para ratificar su decisión de avalar el allanamiento. “Es una tarea que realiza el magistrado y no se le puede impedir llevarla adelante”, dijo el presidente del Bloque Justicialista, que calificó la medida pedida por Bonadio como “el allanamiento más publicado de la historia judicial”. Después, Pichetto volvió a marcar su posición respecto de la discusión por los fueros. “No hay ningún impedimento para que un diputado o senador sea investigado hasta la condena. Lo único establecido es la inmunidad de opinión y la de arresto”, dijo.
“Hubo una decisión de no dar quórum por parte de un sector importante del peronismo. La ex presidenta tendría que darle la llave de su departamento al juez para que ingrese si no tiene nada que ocultar. Lamento que sus compañeros o ex compañeros avalen esto”, afirmó el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, una vez levantada la sesión, que quedó nuevamente programada para el miércoles 22 a las 14.
Más allá de las ausencias del peronismo en el recinto, el oficialismo también contribuyó en la falta de quórum. El senador Bullrich está de vacaciones en Europa mientras que la fueguina Boyadjian está de licencia por cuestiones médicas. Faltaron dos senadores en el recinto para dar inicio a la sesión.